En un acto de transparencia, debo informar, para quienes no lo saben, que el fundador y actual director de Diario del Norte, como también del Sistema Cardenal, es mi hermano de sangre.
Con él, así como con la demás familia, hemos mantenido la independencia, por lo que se piensa, se dice y se hace bajo el presupuesto de las responsabilidades de las actuaciones individuales y el profundo respeto a la condición de sujetos de derechos.
A propósito del aniversario número 13 del periódico del norte de la región Caribe, que se cumple el primer día del séptimo mes del año, con una posición objetiva, por iniciativa propia y curado de mutuos elogios, traigo a la memoria y aporto el testimonio del esfuerzo sostenido por un proyecto de comunicación realizado por Ismael Darío para que sirva de ejemplo de emprendimiento, no fácil de sacar adelante, en las condiciones más difíciles para su permanencia en tiempo, cumpliendo una función social estratégica y con una competencia cada vez más creciente.
Desde 1992, soy testigo excepcional de su lucha para sacar adelante el sueño de un periódico para el departamento de La Guajira, a partir de un radioperiódico que se transmitía por la emisora Radio Delfín de Riohacha. Fueron muchas madrugadas las que transcurrieron para una labor de reportería infatigable con el apoyo de su inseparable máquina de escribir mecánica. De lunes a viernes no había pausa para recoger las noticias con los precarios recursos de la época y elaborar unos libretos noticiosos para ser leídos por el director de El Flechazo.
En el justo propósito de dirigir su radioperiódico trabajó con total dedicación en el difícil sector del transporte y aduanero. Lo que pudo ahorrar lo invirtió en adquirir una lánguida y desvencijada emisora de tubos de amplitud modulada. Pero su ilusión era diseñar y editar un periódico al servicio de La Guajira que tanto lo necesitaba.
El primero de julio de 2009, fecha de conmemoración de la creación del departamento de La Guajira, se lanza a la aventura de imprimir la primera edición del Diario del Norte y desde entonces no ha parado la rotativa de Gámez Editores hasta la fecha
Las cuatro generaciones de la extensa familia Fernández, en cabeza de su abuelo, maestro mayor Manuel José, su padre Abel Darío, sus tíos, sus hermanos y hermanas, su esposa, hijas, nietos, yernos, sus primos, sobrinos, por nuestro conducto, hacen público lo que en privado reconocemos del fundador y director de Diario del Norte: El esfuerzo, la perseverancia y el compromiso para sostener, contra viento y marea, un proyecto periodístico que marca la diferencia con otros, propuesta de comunicación y construye patria día a día formando opinión pública y ciudadanía por los medios escritos, electrónicos, audiovisuales y sonoros.
Reconocemos que honra la memoria, preserva y aumenta el legado de nuestro núcleo familiar y se constituye en referente y ejemplo de tenacidad para las nuevas generaciones fernandinas por sostener una empresa plural que le abre los espacios para que ciudadanos y ciudadanas expresen sus opiniones de manera responsable y contribuyan a fortalecer la democratización de la información.
En unidad, desde lo profundo de nuestros solidarios sentimientos que nos caracteriza como familia, congratulaciones, reconocimiento al mérito y fraternales felicitaciones a Ismael Darío Fernández Gámez por llegar, a pesar de todas las circunstancias adversas y riegos, a la edición número 3.723 de Diario del Norte de manera ininterrumpida y sostenida.