Miguel Ángel Jusayú fue un escritor wayuú que pasó de ser ayudante de transporte y vendedor de lotería a convertirse en el ganador del Premio Nacional de Literatura de Venezuela, así mismo, la Universidad del Zulia le concedió un doctorado honoris causa. Nació en 1933 en Wüinpumüin, al noroeste de Nazareth (Alta Guajira) y falleció el 8 de junio del año 2009 en Maracaibo, donde pasó la mayor parte de su vida adulta.
Se comenta que, a muy temprana edad perdió la vista a raíz de una enfermedad, por lo que, estudió en el Instituto para Ciegos en Venezuela, convirtiéndose en un reconocido investigador y profesor de la cátedra de lenguas indígenas en la Universidad del Zulia.
Sus textos más destacados son: ‘Morfología guajira’; ‘Relatos guajiros’; ‘Relatos guajiros II’; ‘El idioma guajiro. Su fonética, su ortografía y su morfología; ‘Diccionario de la lengua guajira: castellano-guajiro’; ‘Diccionario sistemático de la lengua guajira’; ‘Morfología de la lengua guajira’; ‘Kanewa, el árbol que daba sed’; ‘Ni era vaca ni era caballo’; ‘Gramática de la lengua guajira’ (morfosintaxis).
De los textos antes mencionados, algunos estudiosos del tema han catalogado a Miguel Ángel Jusayú como un lexicógrafo, literato y gramático. En particular, el rol gramático de Miguel Ángel Jusayú lo intentó categorizar como un filósofo del lenguaje en una investigación que estoy desarrollando, donde se demostrará con argumentos contundentes de que existe una filosofía propiamente wayuú. Por ahora, el presente texto se enfoca en exaltar su trayectoria académica y el reconocimiento que se merece como un gran representante de la cultura indígena wayuú a través de sus escritos.
Por otra parte, ‘Relatos guajiros’ primera y segunda edición son unas series de cuentos que rescatan la oralidad de la cultura indígena wayuú. En ellas, se presentan cuentos y mitos que en cierta medida explican sucesos de creencias, sabidurías y espiritualidad de los indígenas wayuú. Cabe destacar que, Miguel Ángel Jusayú se preocupó por ser entendido por cualquier tipo de público, por ejemplo, Jusayú expresa en la introducción de relatos guajiros lo siguiente: “Ahora bien, hermano alijuna, pensando en ti, me he tomado la tarea de escribírtelos y traducírtelos para que tu también te deleites con su lectura. A pesar de las diferencias de lenguaje y de estilos de vida, he trabajado con cuidado, con diligencia, con paciencia y sobre todo con amor, por lo que conservan su esencia autóctona”.
A continuación, resumen de algunos relatos.
‘Ni era vaca ni era caballo’
Es uno de los cuentos clásicos de Miguel Ángel Jusayú, en el que relata la historia de un niño wayuú que no tuvo la oportunidad de vivir su etapa como cualquier otro niño común y le tocó trabajar en el campo de la ganadería. La tesis central de este cuento es el acercamiento del niño wayuú con el mundo alijuna, un acercamiento que empieza con ver por primera vez un camión. El niño wayuú asoció el camión con yolu´já debido a que lo atemorizaban con animales del monte diciéndole lo siguiente: “hay una cosa horripilante y es muy mala, que se llama yolu´já. El yolu´já es andariego y recorre los campos y caminos en las noches; captura a la persona con la que se topa, no la deja tranquila”. Luego de ver al camión por primera vez y quedar en estado de shock sus familiares le explicaron lo que había visto.
El niño wayuú al comprender lo que había visto quedó muy intrigado y su primo mayor le explicó cómo funciona el camión, le contó lo siguiente: “dentro de él hay una máquina, llamada motor, precisamente es con lo que camina el camión. Ello tiene fuerza, porque lleva dentro puesta gasolina encendida. Junto al motor se encuentra sentado un alijuna, es el que lo hace caminar, el que lo hace detener, el que lo hace desviar, el que lo hace retroceder: lo llaman chofer”. Después de todas esas explicaciones, al niño wayuú se le ocurrió la idea de poner a prueba el poder de la gasolina con el burro de su abuela.
Lamentablemente el niño wayuú en su ignorancia quemó al burro y tuvo que huir del lugar, tomó la decisión de no volver más porque su padre lo iba a maltratar. En el camino se encontró a unos paisanos que iban a vender sus cabras donde los alijunas. Al llegar al lugar donde habitan los alijunas el niño wayuú decidió quedarse, pasó mucho sufrimiento, no sabía su lenguaje y le tocó trabajar a cambio de comida.
‘Relato de un hombre cuya mujer murió’
La idea central de este relato es la desobediencia. Esta es la historia de un hombre que perdió a su familia, primero se les murieron los hijos de manera repentina y luego su mujer. Al quedar sólo, el hombre lloraba todas las noches por la ausencia de su mujer, sus familiares le ofrecieron ayuda pero éste se negó. Una noche se le apareció una mujer con características físicas iguales a las de su esposa y con la presencia de esta mujer el hombre cambió de semblante. Lo curioso del cuento es que la mujer se negó a ser tocada por el hombre y en un par de ocasiones lo invitó al lugar donde ella habita, ese lugar vendría siendo donde están todas las personas ya fallecidas.
El hombre, sin ponerlo en duda decidió irse con la mujer que se le apareció, al llegar a ese lugar, el hombre empezó a ver personas ya fallecidas pero esas personas lo detestaban, hasta los mismos hijos, padres y demás familiares. Un día, el hombre decidió acostarse con su mujer pero ella se negaba, por lo que, esperó a que ella se durmiera y quedará rendida. Cuando el hombre ve la oportunidad de acercarse a la mujer la empieza a tocar y de repente ella se desaparece, al mismo tiempo, el hombre aparece en un lugar totalmente extraño y solo.
El hombre empieza a caminar y llega a una casa. Un viejo lo atiende y lo trata como nieto, este viejo sería Ma´leiwa. El viejo se portó bien con el hombre, pero el hombre lo desobedeció, por lo que, fue alejado por la mujer del viejo que vendría siendo Pülóui. El hombre llega a una casa de otro viejo que vendría siendo un murciélago: Este murciélago le enseña muchas cosas, como por ejemplo, tejer. El murciélago junto con una araña ayudan a que el hombre se vaya para su lugar natal pero bajo algunas condiciones y si no las cumple morirá. El hombre baja al lugar donde están sus familiares vivos y, al pasar el tiempo, incumple las condiciones del murciélago y fallece de manera repentina.