La Procuraduría Primera Distrital de Instrucción asumió de oficio la investigación disciplinaria contra una patrullera de la Policía Metropolitana de Bogotá, señalada de agredir a un ciudadano durante un procedimiento en la localidad de Suba. Los hechos, ocurridos en octubre de 2024, salieron a la luz el pasado 1 de enero gracias a un video que se viralizó en redes sociales.
En la grabación, se observa cómo la uniformada golpea con su bolillo al ciudadano, quien aparentemente estaba grabando el operativo con su teléfono móvil. La patrullera le exige entregar el dispositivo para verificar el código Imei, y, tras un intercambio de palabras, procede a agredirlo. «Mire hacia allá, a mí no me esté tomando fotografías ni videos (…), vaya y se las toma con su madre, conmigo no», expresó la uniformada logrando ser captada en ese momento.
La procuradora distrital Helga Díaz, encargada del caso, señaló que el proceso buscará determinar si la patrullera debe ser llamada a juicio disciplinario. “La Procuraduría Primera Distrital de Instrucción asumirá de oficio la investigación disciplinaria que adelanta la Inspección General de la Policía Nacional en contra de una patrullera que en medio de un operativo de requisa agredió con su bolillo a un ciudadano. A través de prueba, se determinará si debe ser llamada a juicio disciplinario a esta servidora pública”, indicó.
Por su parte, la Policía Metropolitana de Bogotá abrió una investigación interna para esclarecer lo ocurrido y rechazó contundentemente el uso excesivo de la fuerza por parte de sus oficiales. En un comunicado, la institución afirmó: “Rechazamos esta clase de comportamientos y el uso desmedido de la fuerza. Así mismo, seremos contundentes ante las actuaciones de policías que vayan en contravía de los preceptos institucionales”.
Aunque los hechos ocurrieron meses atrás, solo hasta ahora la Policía conoció el caso gracias a la difusión del video en redes sociales.
Este material ha generado un amplio debate público sobre el uso de la fuerza en los procedimientos policiales y la necesidad de fortalecer los mecanismos de control y rendición de cuentas en la institución.