Riohacha es un rinconcito del Caribe colombiano, con sus incendiados crepúsculos, llenos de embrujadas guaridas, con sabor a piratería, bacanales nocturnas, con cañonazos en fuego cruzado y algarabía guerrera de los desnudos hijos del mar.
En esta ciudad, las nuevas generaciones se destacan por su crítica acertada y progresista que le está dando un nuevo dinamismo a la Universidad de La Guajira, de la que ya brotó un gobernador (donde se cambiaron las reglas, al quitarnos las regalías el Gobierno nacional, con la coordinación de la ponencia de un senador barranquillero, que descaradamente siempre ha venido a buscar votos acá, ha quedado nuestra Universidad en cuidados intensivos, pero, bajo la acertada dirección de Carlos Robles Julio, la ha sacado adelante y hoy se respira mayor confianza en el claustro universitario).
Riohacha, también es el bullicio del mercado, donde una india tararea un canto triste, como un sermón o elegía a la sociedad que lo margina; la imagen de un barco que se aleja; la del adolescente que vende arepa de chichiguare o tortuga frita.
Definitivamente, esta ciudad señorial es un mar de verano. Hoy convertida en Distrito Turístico, gracias a su gestor, como lo es el senador de la República por el partido de la U, Alfredo Deluque Zuleta, pero pareciera que no haya sucedido nada, todavía no ha comenzado a recibir sus beneficios del presupuesto nacional por este concepto.
Se acerca un nuevo 2 de febrero, un día especial para los riohacheros, los raizales y los que de corazón aman esta ciudad. Quién iba a imaginar que la patrona de Riohacha, La Virgen de los Remedios o “La Vieja Mello”, ¿se convertiría con los años en la hacedora de milagros de los políticos? Sí, cada 2 de febrero y cuando se acercan nuevas elecciones de gobernador, de alcaldes, de diputados y concejales, las fiestas patronales se convierten en un acontecimiento político-religioso, de altas connotaciones.
La romería para el caso de políticos que aspirarán, especialmente para gobernación y alcaldías, es algo nunca antes visto, en la ciudad. Llegarán de todos los rincones del departamento, a buscar su “milagrito” electoral y a apoyar al candidato de sus preferencias para gobernador y alcaldes de los 15 municipios. Ahí, la Virgen de los Remedios va a hacer su milagrito en bien de La Guajira. A fe que “La Vieja Mello” les hará el milagro, de eso estamos seguros.
Ya La Guajira espera tener un nuevo amanecer, que quien gane como gobernador, tenga la visión y misión de colocar al Departamento con un futuro más halagador. El 2 de febrero se combinarán las fiestas religiosas de nuestra “Vieja Mello”, con la fiesta de la política, donde los sectores tradicionales mostrarán sus fuerzas y su liderazgo que gozan a lo largo y ancho de La Guajira.
El gran milagro que hizo ‘La vieja Mello’, ocurrió un 14 de Mayo de 1663, cuando las aguas embravecidas del mar Caribe intentaban arrastrar la pequeña parroquia, en ese entonces, llamada Riohacha, fue cuando sus habitantes de la época sacaron a la virgen, la pasearon y cuando iba en la famosa “Calle de las Perlas”, al frente de lo que es hoy el Hotel Arimaca y el Banco de La República, se cayó su corona y posteriormente se produjo el milagro: las aguas comenzaron a regresar a su cauce normal y los riohacheros, desde ese día, veneran a la Virgen de los Remedios, como su patrona y protectora. Como lo anotaba en el párrafo anterior, ya la Virgen de los Remedios no solamente aplaca las olas embravecidas del mar, sino que hace milagros a los políticos en todos los sentidos.
Recordemos el del expresidente de la República, Álvaro Uribe Vélez, en el año 2002, quien ese 2 de febrero cargó a la virgen, recorrió la procesión con ella acuesta, recibió la vela, y días después ya Uribe era el favorito de los colombianos y desde esa fecha, el expresidente de los colombianos se ha vuelto devoto de ella. Esperamos todos los guajiros que el primer milagro se dé de manos de presidente Gustavo Petro, nombrando en propiedad a un gobernador o gobernadora, para terminar con la interinidad en el Palacio de la Marina.
Así ha sucedido con gobernadores y alcaldes que han recibido el milagro de “la vieja mello”, al igual que senadores de acá y de afuera, acuden de manera puntual, cada 4 años, a pedir el famoso milagro, que, de manera misericordiosa, la Virgen de los Remedios se los concede, pero este año a los que aspirarán a la gobernación, “La Vieja Mello” los escuchará en la sagrada eucaristía y de seguro les mirará su corazón del porqué de sus aspiraciones para dirigir al Departamento por los próximos cuatro años.
Un nuevo 2 de febrero, una nueva fecha para enmarcar. 2 de febrero que llega con el año político, este día el bullicio, el gentío y la devoción a la patrona, no disminuirán un ápice, al contrario, se sentirá más ese fervor que despierta la patrona de los riohacheros a los que acuden a recibir su bendición y su milagro.
Los encuentros políticos con almuerzos y parrandas a bordo, se sentirán por doquier, para hacer los respectivos amarres de lo que viene para el 29 de octubre y como siempre, “La Vieja Mello”, cumpliéndole de manera puntual ese milagro, no solo a los que van con fe como riohacheros, sino a los que aspirarán a la gobernación de La Guajira, así como de alcaldes, diputados y concejales, que este 2 de febrero ratificarán que son devotos de la virgen y creen firmemente en Dios. ¡Pero por favor, vieja mello, un nuevo 2 de febrero que viene cargado de emociones religiosas y políticas en bien de nuestra patrona, por el lado religioso combinado con los intereses políticos, cuando se oficialicen, especialmente, las candidaturas a la gobernación!