No es tener una reacción contestataria lo que le estamos proponiendo a las fuerzas vivas del Sur de La Guajira, a toda su dirigencia gremial, comunal, política, social y a su sociedad civil, para que, haciendo eco a ese llamado que nos ha hecho Normando Suárez Fernández, solicitemos con respeto, pero con contundencia y potestad para que el Diálogo Regional Vinculante que convoca a los 9 municipios del Sur de La Guajira, se haga en uno de esos municipios y no en nuestra ciudad capital, Riohacha.
Esa gran propuesta para aportar para la formulación, concertación y aprobación del Plan Nacional de Desarrollo 2022 – 2026, “Colombia Potencia Mundial de la Vida”, cuya realización está programada para el 6 de octubre del 2022, y que reconocemos que es novedosa su mecánica por llevarla a las regiones y vincular los territorios, debe aprovecharse para que sea una estrategia de integración de las regiones.
Así como está concebida para La Guajira, no deja de enviar un mensaje equivocado a sus habitantes, porque les genera a los habitantes del Sur de La Guajira otra sensación de dependencia. En estos momentos estamos reclamando y apostándole a la recuperación del liderazgo social, económico, gremial, académico y deportivo de nuestra Provincia de Padilla, y así mismo, recuperar la capacidad de convocatoria y fortalecer la oferta logística de nuestra capacidad instalada para que se puedan desarrollar en cualquiera de los municipios del Sur de La Guajira, eventos como ese y de la envergadura y talante que se requiera.
Bien lo expone Normando Suárez Fernández en su columna del 19 de septiembre del 2022 en Diario del Norte, cuando reconoce que en el Sur de La Guajira tenemos un gran potencial y connotado numero de líderes y profesionales con formación, experticia y experiencia para aportar ideas, procedimientos y sabias propuestas técnicas para enriquecer ese Plan Nacional de Desarrollo en cualquiera de sus dimensiones y alineadas a la solución de las múltiples necesidades que tradicional y ancestralmente han agobiado a nuestro pueblo, atrasado su infraestructura y ralentizando su dinamización económica por lo que el desarrollo social y humano de nuestras comunidades es paupérrimo, denigrante y desconectado de la realidad nacional y mundial.
Por eso y más nuestro llamado solidario a la Presidencia de la República, al director Nacional de Planeación y al Consejero para las regiones y líder de este ejercicio en La Guajira, Luis Fernando Velasco, para que revisen esa programación y redefinan el lugar de citación para la realización de ese Diálogo Regional Vinculante y su denominación sea acorde a esa aspiración de todos los guajiros, de tener un territorio unido, autónomo e integrado. Les pedimos que no desaprovechen la oportunidad para contribuir con ese anhelo de integración regional y qué mejor que sea liderado en esta oportunidad por ustedes.
Otro valor agregado de esa revisión y acuerdo que sea en un sitio en el Sur de La Guajira, es contar con la auténtica y masiva participación de los líderes que conocen padecimientos, dificultades y limitaciones de sus zonas y que pueden tener aquí en este ejercicio de formular, concertar y aprobar ese Plan Nacional de Desarrollo, la posibilidad de concretar propuestas de solución, y además, esto puede reforzar y sensibilizar a los alcaldes para de acuerdo a sus finanzas puedan participar, cofinanciar estos proyectos priorizados por los que saben, por los que viven a flor de piel esos rigores de la carencia, de la ausencia de soluciones básicas para despegar, ojalá una vez por toda, hacía una ruta de desarrollo real y no solos titulares “de voy hacer, vamos hacer, sino, aquí está lo mío, pongan lo suyo y solucionamos y acabamos con esa deuda social del Estado y de muchos gobiernos nacionales con La Guajira”.
Señores alcaldes, señores miembros de las Juntas de Acción Comunal, señores líderes de los diferentes gremios económicos del Sur de La Guajira, sector de la educación, de la salud; sector de la academia y sociedad civil en general del Sur de La Guajira, es unidos como vamos a reivindicar nuestro territorio, nuestra autonomía, nuestra capacidad de convocatoria y liderazgo regional, y no solo en esta coyuntural oportunidad reclamando o solicitando que ese encuentro de Diálogo Regional Vinculante con los municipios del Sur de La Guajira se haga en el Sur de La Guajira, sino participando en las diferentes dimensiones en que se mueve la sociedad, sus gremios, sus territorios y sus diferentes dinámicas y demás actividades.
No estamos planteando una confrontación regional al solicitar que ese Diálogo Regional se dé en el sur, o cuando decimos que el sur necesita recuperar autonomía y ganar liderazgo, sino que ponemos sobre la mesa una voluntad de sinergia y crecimiento común a través de la identificación de planes comunes y rutas de soluciones comunes.
Por eso creo que ésta es una oportunidad para que las Secretarías de Planeación de nuestros municipios convoquen ya, en cada municipio, que se haga ese ejercicio de construir propuestas factibles, con diferentes gremios y variados sectores para llegar cada municipio a la gran reunión del Diálogo Regional Vinculante con un compendio de sus necesidades bien documentadas, bien argumentadas y justificadas para que puedan ser tenidas en cuenta en ese marco de construcción del PND.
Guajiros, el despertar y empezar a transitar sobre rutas para el desarrollo con propósitos unificados y esquemas diferenciales por regiones que identifiquen a La Guajira como un solo territorio, es una gran señal de avance, de guajirismo, de identidad e integración. ¡Loor al pueblo Guajiro! ¡Gloria a su despertar y cohesión cultural y social!