El presidente Gustavo Petro y la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre), Laura Sarabia, firmaron el 26 de septiembre un decreto que amplía las funciones de la vicepresidenta y ministra de la Igualdad, Francia Márquez.
A pesar de las críticas por la baja ejecución presupuestal de las entidades a su cargo, el Decreto 1188 le asigna más de diez nuevas facultades, centradas en la protección de poblaciones vulnerables y la implementación del acuerdo de paz.
Entre sus nuevas responsabilidades, Márquez tendrá la misión de establecer mecanismos para proteger la identidad cultural y los derechos de las comunidades negras de Colombia. También deberá fomentar su desarrollo económico y social, con el objetivo de garantizar condiciones reales de igualdad frente al resto de la sociedad.
El decreto le otorga la facultad de coordinar políticas públicas orientadas a reducir las brechas sociales, económicas y ambientales, además de supervisar el cumplimiento del capítulo étnico del Acuerdo Final de Paz. Esto incluye la implementación de soluciones para las comunidades del litoral Pacífico y el norte del Cauca, zonas afectadas por el conflicto armado.
Adicionalmente, Márquez podrá expedir directrices y actos administrativos necesarios para cumplir con sus nuevas responsabilidades, lo que fortalece su papel en la ejecución de políticas orientadas a la igualdad y la paz en el país.
Con estas nuevas funciones, se busca dar un impulso a las iniciativas que promueven el bienestar de las comunidades más vulnerables.