La Defensoría del Pueblo ha emitido una alerta ante la crítica situación en los departamentos de Huila, Tolima, Valle del Cauca y Nariño, donde las altas temperaturas y la sequía han desencadenado incendios forestales devastadores.
Según el informe oficial, hasta la fecha, los incendios han consumido aproximadamente 7.318 hectáreas de vegetación, y las autoridades locales enfrentan dificultades para controlar los focos más graves.
La defensora del Pueblo, Iris Marín, hizo un llamado urgente a las autoridades departamentales y municipales para que fortalezcan sus sistemas de prevención y respuesta ante emergencias. Marín destacó la importancia de tomar medidas preventivas, como controlar las quemas y evitar arrojar materiales que puedan actuar como lupa y alimentar los incendios.
“El impacto ambiental y social de estos incendios es alarmante. Es indispensable contener el daño a la biodiversidad y proteger a las familias que habitan en zonas rurales afectadas por estas conflagraciones”, expresó Marín, mencionado la importancia de una respuesta inmediata.
El departamento de Tolima es actualmente el más afectado, con ocho incendios activos en municipios como Natagaima, Melgar, San Luis, Anzoátegui y Ortega. La gobernadora del Tolima, Adriana Magali Matiz, advirtió sobre las devastadoras consecuencias de la emergencia, que ha puesto en grave riesgo a especies como armadillos, zorros y aves, muchas de ellas desplazadas o heridas por las llamas.
En respuesta a la emergencia, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd) ha desplegado ocho aeronaves y 168 bomberos para controlar los incendios, apoyados por 92 efectivos de la Brigada Militar Especializada en Desastres, 31 de la Unidad de Operaciones Especiales (Ponalsar), 58 de la Defensa Civil y 18 de la Cruz Roja.
Paralelamente, la Defensoría también alertó sobre la grave situación en la región amazónica, donde la sequía amenaza la supervivencia de comunidades locales, afectando sus derechos fundamentales.
Hasta el momento, en 2024 se han registrado 143 incendios forestales en todo el país, en gran parte relacionados con el fenómeno del Niño.