La Junta Directiva del Banco de la República bajó en 50 puntos básicos (pbs) la tasa de interés de política monetaria, pasando de 11,25% a 10,75 %.
La decisión se tomó por mayoría, ya que cinco directores votaron a favor de esa posición y dos lo hicieron por una reducción de 75 pbs.
En su discusión de política, la Junta Directiva tuvo en cuenta los siguientes elementos:
- La inflación anual en junio se mantuvo estable en 7,2%, en línea con lo esperado. La inflación anual sin alimentos ni regulados descendió de 6,1% a 6,0%.
- La inflación anual de alimentos presentó un nuevo incremento de 4,4% a 5,3%, por fenómenos climáticos, mientras que la inflación de regulados se redujo de 13,7% a 13,3%.
- En julio la encuesta mensual aplicada por el Banco a los analistas reportó en la mediana unas expectativas de inflación estables, mientras que aquellas que se derivan de los mercados de deuda pública cayeron para todos los plazos.
- El PIB habría continuado su senda de recuperación durante el segundo trimestre, con comportamientos dispares entre sectores. El equipo técnico prevé que los niveles de actividad económica continuarían recuperándose para alcanzar un crecimiento de 1,8% en 2024.
- Las condiciones de financiamiento externas se tornaron más holgadas ante expectativas de políticas monetarias más acomodaticias por parte de los principales bancos centrales de las economías avanzadas.
La decisión adoptada en la sesión de este 31 de julio, ofrece un nuevo impulso a la recuperación del crecimiento económico y mantiene la prudencia requerida, dados los riesgos que subsisten sobre el comportamiento de la inflación.
El gerente general del Banco de la República, Leonardo Villar, confirmó que “se esperaba que la inflación no tuviera una reducción significativa y que se diera un ligerísimo incremento como el que se vio y, por lo tanto, no constituyó ninguna sorpresa”.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, afirmó que hay unanimidad en la necesidad de seguir reduciendo la tasa, pero lamentó que en lo que no hay unanimidad es en la velocidad del descenso: “Con la decisión de hoy queda claro que la tasa real baja de 407 puntos a 357 puntos, y esto contribuye a la reactivación de la economía colombiana, pero aún falta tramo por recorrer”.
Para el ministro, “el reto es tener una inflación más baja en julio, dado que en 2024 el indicador fue de 0,30% mensual y no se había tocado el precio de la gasolina”.
“Volverá a ser un reto mirar la inflación de octubre, que el año pasado fue de 0,25%, pero, en general, la expectativa se mantiene en que lleguemos a una inflación entre 5,55% y 5,5%. Por lo pronto, la expectativa para cerrar el año la tasa de interés está en 8,5%, y quedan tres reuniones”.