Aunque el Gobierno Nacional extendió el aislamiento obligatorio preventivo hasta el 11 de mayo, decidió flexibilizar algunas restricciones para comenzar a reactivar la economía. En ese sentido, el presidente Iván Duque confirmó que los sectores de la construcción y la industria manufacturera serán las primeras que podrán retomar sus actividades, eso sí, con estrictas medidas de bioseguridad.
La vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, explicó con detalle cómo deben ser los protocolos de higiene en las empresas que podrán reabrir en los próximos días:
«Todo el tema del material de la ropa protección, en algunas industrias, no en todas. Es necesario los guantes y, por supuesto, Presidente, también, el aseo sobre las superficies de trabajo, el aseo también en el momento de la salida, porque lo que nos interesa por encima de todo es la salud de los colombianos», dijo.
Sobre los trabajos de oficina, Ramírez expresó que deben continuar, en la medida de lo posible, bajo la modalidad a distancia.
«La parte administrativa, el back-office, en esas industrias se siguen haciendo teletrabajo. Aquí, como usted lo señaló, hasta finales de mayo, la idea es que seguimos en este Aislamiento Preventivo Obligatorio, pero lo vamos a hacer productivo, inteligente», agregó la vicepresidenta.
A su turno, el ministro de Vivienda, Jonathan Malagón, aseguró que la actividad edificadora es un sector fértil para la implementación de protocolos que permitan “garantizar no solamente la salud de los colaboradores sino también de los vecinos”.
“Acá estamos hablando de la vivienda. En el caso de Colombia son más de 200 mil viviendas al año, que la inmensa mayoría de ellas ya están vendidas. Y detener la construcción de estas viviendas sería equivalente, al final del día, como comprometer el techo de cerca de un millón de colombianos”, puntualizó.
Así mismo, aseguró que la reactivación de este sector protege el empleo en el país. “Aquí en Colombia son 980.000 trabajadores vulnerables los que tenemos en el sector de edificaciones, y si, eventualmente, se compromete la viabilidad de sus empleos, no solamente sería, desde el punto de vista macroeconómico, cerca de varios puntos porcentuales de tasa de desempleo, sino que empezaríamos un trágico peregrinaje de empleo formal hacia pobreza, y eso es lo que estamos tratando de prevenir”, indicó.