Se está convirtiendo en costumbre que para la temporada alta del turismo en La Guajira, la delincuencia haga lo suyo cometiendo atracos e hiriendo a quienes vienen a disfrutar de nuestras playas, nuestra gastronomía y nuestra cultura.
El turismo para el Departamento no deja de ser una muy buena oportunidad para mover nuestra economía informal, pero es necesario que las autoridades de La Guajira le brinden todas las garantías de seguridad para que nativos y foráneos disfruten con tranquilidad de su receso.
No sabemos si las autoridades en el Departamento conocen lo que sí sabe la delincuencia: para ésta temporada centenares de familias aprovechan para visitar los sitios turísticos de la península que son apetecidos por el resto del país y extranjeros que desean conocer nuestra cultura exuberante ligada a la de los wayuú que predomina en esta zona, así como sus ríos, playas y rincones desérticos.
Y qué decir de los sitios religiosos. El principal templo católico de La Guajira es la Catedral Nuestra Señora de los Remedios en Riohacha, la Ermita de San Lucas en El Molino que guarda celosamente la historia de los indígenas cariachiles, y otros sitios religiosos que también son visitados por quienes para esta fecha se programan.
Previo al inicio de la temporada alta, los periodistas no sabemos cuáles son los planes de seguridad que tienen las autoridades para salvaguardar al turista que se atreve a visitarnos, pero se está convirtiendo en costumbre para la delincuencia de la Alta Guajira en que siempre tiene que dejar una evidencia de su presencia en la zona que mancha la imagen del turismo a nivel nacional.
Los actos cometidos por antisociales que se encuentran al acecho en las carreteras y lugares más visitados del territorio, profanan el buen nombre de los guajiros, principalmente de aquellos que aprovechan estas épocas del año para sobrevivir del turismo, entre ellos las indígenas, quienes por estos días preparan sus mejores artesanías para ofrecerlas a los visitantes.
La arremetida de la delincuencia en contra de nuestros turistas, afectan el servicio de la única industria que no genera contaminación, pero que produce circulante entre quienes para esta temporada trabajan en pro del turismo.
Las autoridades de La Guajira deben ser más preventivas con los turistas, especialmente por quienes para esta temporada contemplan disfrutar del territorio guajiro, para llegar a nuestra península y cuenten con la tranquilidad y la confianza de que se les ofrecerá todas las garantías necesarias para que hagan un viaje seguro y placentero.