Durante 2021, el Peso colombiano se convirtió en una de las monedas más devaluadas de todo el mundo. Además, en los primeros días de 2022 la moneda nacional sigue perdiendo su valor.
De acuerdo al portal especializado Today In 24, el peso colombiano fue la moneda que más valor perdió el año pasado, sufriendo una devaluación del 18,9%.
Otras mediciones también sitúan al peso colombiano como una de las cinco monedas más devaluadas del planeta durante los últimos cinco meses, compartiendo el deshonroso top 5 de la depreciación monetaria con la Lira turca, el Peso argentino, el Sol peruano, y el Peso chileno.
La devaluación ocasiona problemas para las personas que deben pagar sus deudas en dólares, o para los ciudadanos que desean realizar actividades con la moneda estadounidense, como el turismo al exterior, dado que ahora deben invertir más pesos para obtener un dólar.
Luego del fuerte impacto generado por la pandemia de Covid-19, el peso colombiano sigue perdiendo su valor en el mercado debido a la incertidumbre que existe en el país por cuenta del complejo panorama político del primer semestre del año, una mayor demanda del dólar y las primas de riesgo.
Felipe Campos, director de Investigaciones de Alianza Valores dijo al diario La República que un 4% de la devaluación está ocasionado la incertidumbre generada por las elecciones de este año.
Por su parte, Javier Díaz Molina, presidente de Analdex, también dijo que el fenómeno también es muestra de que la economía colombiana sigue golpeada tras la crisis ocasionada por la pandemia en 2020, todavía hay un déficit en la balanza comercial del país.
Y a todo eso, se suma que Colombia sufrió la pérdida de su grado de inversión y el déficit de cuenta corriente que tiene la nación. “Hay que tener presente la pérdida de grado de inversión, además que las importaciones bordean casi los US$5.000 millones mes, mientras que las exportaciones están alrededor de los US$3.200 millones. Lo que se traduce en que estamos sacando más dólares de los que entran, por eso decimos que hay un déficit de cuenta corriente superior al 5% del PIB y eso hace más vulnerable a la moneda”, dijo Wilson Tovar, gerente de investigaciones económicas de acciones y valores S.A.