Llegó el 2022 en medio del virus del Covid-19, una alerta que debe ser tenida en cuenta por todas las autoridades de La Guajira, para implementar las medidas que sean necesarias para salvaguardar la vida de quienes habitan en este territorio.
Este es también un año electoral, donde los colombianos ejercerán el derecho al voto para elegir al nuevo presidente, senadores y representantes. Así como el año de la entrega de obras por parte de algunos alcaldes y gobernadores.
En el caso de La Guajira, se le apuesta a que algunas obras que fueron anunciadas por los mandatarios el año pasado, para que logren concluirlas antes que terminen sus periodos de gobierno. Obras como la remodelación del estadio Federico Serrano Soto, la nueva plaza de mercado, el puente sobre el Riíto y La Marina, son algunas que, en el caso de la capital de La Guajira, se encuentran en la agenda del alcalde José Ramiro Bermúdez y del gobernador Nemesio Roys Garzón.
Debido a ello, es necesario redoblar los esfuerzos que sean necesarios para lograr el objetivo final que es poder concluirlas y entregarlas a la comunidad como corresponde para evitar que se conviertan en un elefante blanco.
La Guajira requiere que quienes hoy se encuentran en cargos de poder, demuestren que si es posible cumplir con lo pactado en sus planes de desarrollo, y que también puedan entregarle a la comunidad las obras que prometieron para que puedan gozar de una mejor calidad de vida.
El 2022 es el año de las realizaciones, en donde también la comunidad juega un papel importante en el seguimiento a cada obra que se esté ejecutando, para garantizar que los contratistas estén cumpliendo con lo pactado en los contratos y que se entreguen de acuerdo con el tiempo convenido.
Bienvenido el nuevo año, es el momento para reafirmar los compromisos, para remar todos a un mismo lado para lograr que La Guajira avance en su desarrollo social y económico en pro del bienestar colectivo.