El barrio El Cafetal de Villanueva, es primigenio en la historia de este bello municipio del sur de La Guajira. Sus inicios se remontan al año de 1840, cuando el líder del pueblo de la época Francisco Dangond o ‘Musiú’ Dangond, cultivaba café (más de 650 mil matas de acuerdo a lo escrito por el francés Reclus Eclus, quien visitó a Villanueva en esas calendas) y fue cuando el francés trajo en compañía de los hermanos Cárdenas, Botello y Pabón, quienes habían legado de Santander derrotados en la batalla de Tescua en 1841 y se establecieron en estas tierras (fueron los socios industriales del cultivo del café de Musiu Dangon) de Abrego, de Ocaña y de Convención, Santander, campesinos que sabían del manejo y recolección de productos cultivados en serranías. Ellos llegaron en masa a Villanueva y fundaron el barrio El Cafetal, otros se asentaron en el barrio San Luis, que ya estaba fundado, constituyéndose en los primeros pobladores de El Cafetal.
Desde esa época, El Cafetal se constituyó en el barrio más pujante y más laborioso de la región. Ya que no solo se dedicaron al cultivo del cafeto de ‘Musiú’ Dangon, sino que por los excelentes suelos de la Sierra Negra, diversificaron sus cultivos en frutas, hortalizas, arracacha, malanga, yuca, dominico, plátanos y diferentes variedades de guineo y se convirtió Villanueva en la despensa del Sur de La Guajira y de Valledupar. Y se identificaba a los cafetaleros como los mejores productores de café y de productos agrícolas. De sus ancestros heredaron la labor del campo, la tenacidad y el éxito en el cultivo de la tierra. Y de Abrego, Ocaña y Convención llegaron casi todos los apellidos que hoy pueblan este barrio inmarcesible en la historia de la Villanueva pujante y bravía: Los Rodríguez, Cárdenas, Quintero, Ramírez, Contreras, Olmedo, Botello, Pabón, entre otros.
Y no solamente las familias que poblaron El Cafetal, fueron exitosas en las labores del campo, sino también que salieron pilosos para el estudio y en la década de los 60 cuando el inolvidable exparlamentario guajiro villanuevero Luis Beltrán Dangond Ovalle, creó el Colegio Nacional Roque de Alba a través de la Ley 17 de Noviembre 6 de 1964, en la historia que siempre ha acompañado a este bello pueblo de odios y rencores y de marginalidad social, el grito de muchos de estos villanueveros fue que ahora quien aguantaba a los “Malangueros” término despectivo que usaban para referirse a los de El Cafetal.