El exjefe paramilitar Salvatore Mancuso, quien en la actualidad está recluido en una prisión de Estados Unidos, se encuentra compareciendo ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), con el propósito de ser admitido y obtener beneficios ante la justicia colombiana.
En una audiencia única de verdad que ha sido dividida en cuatro sesiones, el excomandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) ha prendido el ventilador de la relación que a principios del 2000 existía entre los paramilitares, la fuerza pública, políticos y empresarios del país.
En la primera sesión, Mancuso relató que fue capturado durante un viaje al departamento de La Guajira cuando se disponía a sostener una reunión con Santander Lopesierra y con Juan Francisco “Kiko” Gómez Cherchar, quien después fue gobernador de este Departamento.
Dijo que antes de llegar al encuentro, fueron contactados por la fuerza pública que les dijeron que la guerrilla del ELN estaba invadiendo unas tierras y haciendo un evento público. Mancuso aseguró que se desviaron al lugar y dio la orden a sus hombres de que en caso de que fuera cierta la información, dieran de baja al comandante guerrillero.
El entonces jefe paramilitar continuó su camino escoltado por una Convivir. Sin embargo, fueron detenidos por un teniente de la Policía que les pidió sus identificaciones.
“Era como recién graduado. Le decimos que éramos Convivir. No creyó. Entonces le decimos que somos las Autodefensas y también empezó a poner problemas. Total, reportó a su comandante, llamó por radio y todo el mundo se enteró. Entonces el comandante de la Policía de La Guajira no quería soltarnos”, narró.
Mancuso logró comunicarse con Carlos Castaño Gil para decirle que si no hacían algo, lo iban a llevar a una estación de Policía y a una cárcel. Castaño, según el exjefe paramilitar, llamó al entonces coronel Roso José Serrano.
“Y Serrano le dijo: ‘Llámate a Naranjo’. Y Naranjo mandó entonces al coronel Danilo González a que nos liberara de allá. Tuvimos que organizar ese tema con el juez, con el fiscal, con los que estaban ahí presentes”, dijo Mancuso en su audiencia.
El exjefe paramilitar añadió que tuvieron que salir disfrazados de miembros de la Policía porque los iban a linchar. Además, Mancuso afirmó que fue escoltado por personal de esta institución.
“Este hecho es bastante diciente porque vincula a las Convivir, las autodefensas y del comandante general de la Policía y el de la Dijín que envían el avión de la Policía para que nos liberen”, afirmó.
La Revista Cambio contactó al general Óscar Naranjo, quien dijo que no se va a pronunciar aun de los hechos. Por su parte, no se pudo contactar con el general Roso José Serrano. Sin embargo, a La W le dijo que tampoco se iba a pronunciar.
Con información de cambiocolombia.com
