La posición de Guillermo Botero como ministro de Defensa quedó seriamente comprometida tras el debate de moción de censura adelantado en su contra por el Congreso de la República, en el que se denunció que siete adolescentes murieron tras ser bombardeados en un operativo de las Fuerzas Militares contra disidencias de las FARC en agosto pasado.
De acuerdo a la denuncia del senador Roy Barreras, los menores abatidos fueron presentados como guerrilleros, lo que calificó como un ‘falso positivo’.
Tras la denuncia, el ministro Botero se defendió asegurando que las operaciones militares están ajustadas a las normas del Derecho Internacional Humanitario y explicó que durante el procedimiento se desconocía la presencia de menores de edad en el lugar del ataque.
“Allí se recuperaron 11 o 12 fusiles (…) una ametralladora, dos pistolas, es decir, había abundante material de guerra y serán sus miembros quienes deberán responder por utilizar menores de edad”, dijo y agregó que “fue una operación lícita, hecha con toda la rigurosidad”.
Luego del debate, la votación para definir el futuro del ministro Botero será el próximo 13 de noviembre en la Plenaria del Senado.