Migración Colombia informó que Aldemar Soto Charry, alias El Ingeniero, fue entregado a la Policía Nacional tras su arribo al país en condición de deportado desde los Estados Unidos. La entrega se realizó conforme a los protocolos establecidos para el manejo de connacionales con antecedentes judiciales y requerimientos activos por parte de la justicia colombiana.
Soto Charry, señalado exintegrante de la columna móvil Teófilo Forero de la extinta guerrilla de las Farc, es requerido por las autoridades nacionales por su presunta participación en delitos cometidos durante el conflicto armado, según registros de la Fiscalía General de la Nación. Su regreso al país se da después de haber cumplido una condena en EE. UU., donde se declaró culpable de cargos relacionados con el tráfico de drogas.
En octubre de 2024, aceptó ante una corte federal estadounidense haber participado en una operación de envío de más de una tonelada de cocaína hacia ese país. Fue condenado a 78 meses de prisión y a cuatro años de libertad supervisada.
Antes de su extradición a territorio norteamericano, Soto había sido condenado en Colombia por su participación en el atentado con explosivos ocurrido en 2003 en Neiva, que tenía como objetivo al entonces presidente Álvaro Uribe Vélez. El ataque dejó 15 personas muertas y decenas de heridos.
Inicialmente, El Ingeniero se había acogido a los beneficios del Acuerdo de Paz de 2016, pero en 2021 fue expulsado de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) tras comprobarse su reincidencia en actividades delictivas. Sin embargo, en 2024, esa misma jurisdicción solicitó la suspensión temporal de su extradición para garantizar su comparecencia como testigo en procesos por secuestros y desapariciones forzadas.
Actualmente, Soto Charry permanece bajo custodia de la Fiscalía General de la Nación, entidad que evalúa las actuaciones judiciales pertinentes con relación a las anotaciones activas en su contra y la posible reactivación de causas pendientes en el país.