El Ministerio de Salud decretó el aumento de 5.36% para la UPC, que es el dinero que le giran a las EPS para la atención de los pacientes, desde el Congreso se ha reabierto la controversia alrededor de la necesidad de la reforma a la salud y del debilitamiento del sistema actual.
Desde el Pacto Histórico, el representante Alfredo Mondragón, uno de los principales promotores de la reforma a la salud, afirmó que las EPS no entregaron información confiable para el incremento de esta cifra.
“Las EPS querían un 16% pero la información que daban era inconsistente, había incrementos de la frecuencia de uso sin corresponder con los registros individuales de la prestación de servicios, hacían certificados de gastos sin hacer cierres financieros y establecían unas reservas técnicas aumentadas sin justificación”, aseguró.
Mientras que Andrés Forero, representante del Centro Democrático y quien ha dado la pelea en la Cámara contra la reforma, aseguró que el incremento fijado para los recursos de las EPS es indiscutiblemente insuficiente.
“Lo que están haciendo el ministro Guillermo Alfonso Jaramillo y el presidente Gustavo Petro en materia de salud raya en lo criminal. En contra de la solicitud de pacientes y otros actores del sistema, definieron un aumento de la UPC a todas luces insuficiente, lo subieron apenas por encima de la inflación, cuando el incremento del salario mínimo fue de 9.5%”, dijo Forero, quien agregó que la crisis sanitaria que se viene será responsabilidad de Petro y Jaramillo.
Después de coincidir con el Ministerio de Salud en la información que no reportaron las EPS, la representante de Alianza Verde, Martha Alfonso, ponente de la reforma a la salud, insistió en que la falta de transparencia muestra que es necesaria una reforma a la salud.
Por otro lado la senadora Paloma Valencia indicó que la pretensión del Gobierno Nacional, es la destrucción del sistema de salud colombiano, en el que las EPS son el actor principal.