La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) lanzó una alerta este jueves tras revelar que 456 firmantes del Acuerdo de Paz han sido asesinados desde su firma en 2016. De ese total, 15 crímenes ocurrieron tan solo en los primeros tres meses de 2025, encendiendo las alarmas sobre la seguridad de quienes dejaron las armas en busca de reconciliación.
Según el tribunal, estos homicidios se han registrado en 158 municipios del país, lo que muestra la gravedad de la situación y el alto nivel de riesgo que enfrentan los excombatientes. La JEP advirtió que este primer trimestre de 2025 ha sido uno de los más violentos desde la firma del acuerdo, lo que está afectando de manera directa los procesos de reincorporación.
El magistrado Alejandro Ramelli, presidente del tribunal, lamentó las cifras y reiteró que “es fundamental cumplir a cabalidad con el Acuerdo de Paz, ya que de ello se desprenden los mandatos de la Jurisdicción”. Aseguró que, pese a los esfuerzos institucionales, la violencia sigue silenciando los proyectos de vida de quienes apostaron por la paz.
Por su parte, la magistrada Xiomara Cecilia Balanta, de la Sala de Amnistía o Indulto, expresó su preocupación por la crítica situación de seguridad. Haciendo un llamado directo al Gobierno nacional, señaló que la protección de los firmantes “debe ser una prioridad inaplazable”, y que es urgente escuchar y atender las demandas de quienes se acogieron al proceso de paz.
La JEP insistió en que cada asesinato no solo representa una tragedia individual, sino también un golpe a la esperanza de reconciliación nacional, e hizo un llamado a fortalecer las garantías de seguridad para evitar que la violencia siga arrebatando vidas que ya habían elegido otro camino.