En anuncio dado la mañana de este 22 de agosto y que para muchos no sorprende, la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y de la Sala Electoral a cargo del caso, Caryslia Rodríguez, ratificó la reelección de Nicolás Maduro como presidente de la República.
Debido a las denuncias de fraude hechas por la oposición que lidera María Corina Machado y que según las actas que tienen en su poder el ganador de las elecciones el pasado 28 de julio fue Edmundo González Urrutia, Maduro pidió al Supremo “certificar” el resultado dado por el Consejo Nacional Electoral (CNE) que lo proclamó vencedor con 52% de los votos, frente a un 43% de su contrincante.
Caryslia Rodríguez fue la encargada de leer la sentencia que “certifica de forma inobjetable el material electoral peritado y convalida esta sala los resultados de la elección presidencial del 28 de julio del 2024, emitidos por el Consejo Nacional Electoral, donde resultó electo el ciudadano Nicolás Maduro Moros para el periodo constitucional 2025-2031”. El fallo es inapelable.
La magistrada citó un informe que concluyó que “los boletines emitidos” por el CNE “están respaldados por las actas de escrutinio emitidas por cada una de las máquinas de votación y mantienen plena coincidencia con los registros de las bases de datos de los centros nacionales de totalización”.
Sin embargo, el Tribunal no entregó mayores detalles técnicos del peritaje que realizó para llegar a esa conclusión, entre otros, el tamaño de la muestra analizada.
El máximo tribunal exhortó al CNE a publicar «resultados definitivos» de las elecciones, sin pedir información del escrutinio.
Juristas coinciden en que este procedimiento era improcedente, al sostener que el Tribunal Supremo asume atribuciones que corresponden al CNE. Además, líderes de otros partidos pidieron a la magistrada Rodríguez se declarara impedida de emitir alguna sentencia por ser militante activa del (Psuv) partido político venezolano de extrema izquierda que respalda a Maduro.
Por sus evidentes vínculos con el régimen, el excandidato Enrique Márquez la había recusado de impartir justicia en Venezuela.
«Hemos introducido una solicitud de recusación contra la presidenta de la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Caryslia Beatriz Rodríguez, que lleva el caso, por la manifiesta vinculación política que ha mantenido y que mantiene con el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv, en el poder) y con Nicolás Maduro, accionante principal en esta causa», dijo Márquez en su momento.
Un día antes de conocerse el fallo del Tribunal Supremo, desde la coalición opositora reunida en la Plataforma Unitaria, informaron que considerarían “ineficaz y nula” una sentencia que “pueda validar el fraude electoral”.
Y a los pocos minutos de oficializarse la sentencia este jueves, González Urrutia reaccionó en la red social X: “Nula”, dice una ilustración que muestra un documento judicial, acompañado por la etiqueta “No usurparán la verdad”.