La recuperación del espacio público y la movilidad son dos de los problemas por los que atraviesa la ciudad de Riohacha. Hoy, la Administración Distrital a través de la secretaría de Gobierno está enfrentando el tema para regresarle a la comunidad esos espacios seguros para la libre movilidad.
La tarea no es nada fácil, sin embargo, el secretario de Gobierno Wilson Rojas Vanegas, está empeñado en demostrar que sí es posible ejercer la autoridad a pesar de todas las dificultades encontradas con quienes de alguna manera prefieren seguir en medio del desorden.
Una ciudad progresa de la mano de su gente, por lo tanto, es importante que la comunidad comprenda el por qué es necesario dirigir el territorio, entendiendo que son mecanismos que garantizan seguridad y orden, esenciales para que llegue la empresa privada, invierta y genere empleo.
Los cambios nunca son fáciles, sin embargo, son necesarios cuando se requiere mostrar avances en ciudades que como Riohacha sigue creciendo de manera desordenada, a donde llegó una alta población migrante que decidió quedarse.
Hoy, en esa decisión de la Administración de mostrar resultados en dos problemas cruciales como la invasión del espacio público y la movilidad, se necesita del total respaldo de la comunidad para que realmente estas medidas se logren concretar.
Si la capital de La Guajira y su gente logran solucionar esos dos problemas, muy seguramente Riohacha se mostrará como una ciudad amable y amigable con el medio ambiente donde su gente es la prioridad.
Son medidas impopulares pero necesarias y urgentes, para evitar que la ciudad colapse en cualquier momento, generando un caos social que muy bien se pueden evitar.
El otro tema es que la administración tiene que mostrar la suficiente capacidad para mantenerse en las decisiones, hacer el seguimiento debido y ejercer el castigo ejemplar cuando los casos lo ameriten siempre bajo el respeto a las personas.
El tiempo avanza, las medidas se deben seguir aplicando y la comunidad debe ser la mejor garante para que por fin juntos, se superen esos problemas que dificultan el bienestar de todos quienes consideran a Riohacha como un buen vividero.