Salir del confort de tu casa no es una fácil decisión, independientemente de las causas de traslado quienes se atreven, los considero valientes.
Desde la prehistoria el ser humano ha estado en constante movimiento, algunas personas se desplazan en busca de trabajo, de nuevas oportunidades económicas, para reunirse con familiares o para estudiar, otros se van para escapar de conflictos, persecuciones, del terrorismo, de violaciones o abusos de los derechos humanos, algunos lo hacen debido a los efectos adversos del cambio climático, desastres naturales u otros factores ambientales, todo lo anterior se ha compilado y hemos visto las imágenes de millones de personas que intentan salir de su país, y en Colombia, Necocli es el trampolín para quienes quieren cambiar el rumbo de sus vidas.
Actualmente 19 mil migrantes represados con el presupuesto disparado y quienes aprovechan la situación para montar emprendimientos y sometiéndolos a pasar circunstancias extremas, pero que poco le afectan porque en su país las crisis son cada día más desesperantes, no les importa atravesar la selva, mares, ríos o desiertos, lo que significa que cualquier cosa es mejor que estar en su país de origen.
Para entrar en contexto y ampliar el tema, entré a la página de las Naciones Unidas y junté información veraz referente a este tema que mueve fibras en muchos, y más si nos remontamos a los años 70 cuando colombianos se radicaron en Venezuela.
En la actualidad el número de personas que vive fuera de su país natal es mayor que nunca. Según el informe sobre las migraciones en el mundo 2020 OIM, a junio de 2019 se estimaba que el número de migrantes internacionales era de casi 272 millones en todo el mundo, 51 millones más que en 2010. Casi dos tercios eran migrantes laborales, los migrantes internacionales constituían el 3,5% de la población mundial en 2019, en comparación con el 2,8% en 2000 y el 2,3% en 1980.
Si bien muchas personas migran por elección, muchas otras lo hacen por necesidad. Según Acnur, el número de personas desplazadas por la fuerza en todo el mundo era de 79,5 millones a finales de 2019.
De ellos, 26 millones eran refugiados (20,4 millones de refugiados bajo el mandato del Acnur, 5,6 millones de refugiados palestinos bajo el mandato de Unrwa. 45,7 millones de personas fueron desplazados internos, 4,2 millones solicitantes de asilo y 3,6 millones fueron venezolanos desplazados en el exterior la era de migrantes venezolanos ha sido la oleada más fuerte que hemos vivido han pasado 10 años en los cuales a través de los medios se ha evidenciado cómo se deteriora un país, son muchas las hipótesis del porqué, pero en mi opinión las decisiones apresuradas nos cobran factura en el futuro, la realidad es que en cualquier lugar del mundo está una persona que extraña su país, y añora compartir con su familia.
Aunque los datos más relevantes de migrantes según los medios de comunicación son de haitianos, venezolanos y afganos en la frontera de México con Estados Unidos se vive una dura realidad de quienes quieren cumplir el sueño americano, los coyotes que conocen muy bien la frontera realizan esta actividad, pero son muchas las circunstancias adversas que en la travesía por el desierto se viven, la imagen grabada de las patrullas fronterizas maltratando a quienes intentan cruzar, la forma de implementar las políticas del migrante que hasta ahora son calificadas como inhumanas, y las deportaciones que actualmente realiza el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, a los migrantes haitianos.
El Estado colombiano debe actuar de manera coherente frente a las dinámicas internacionales en materia de migración, ya sea por inseguridad, violencia, falta de alimentos y medicinas, todo lo anterior es la conciencia de periodos de administraciones políticas que buscan implementar sus planes gubernamentales sin una planeación estratégica y el sin número de programas sociales existentes que han vuelto vulnerable las habilidades de nuestros mandatarios para gobernar un país.
El llamado que diariamente nos hace el universo es buscar nuevas oportunidades y, tal vez, mañana seas tú que me lees, el próximo migrante por el mundo. Quienes deciden migrar son seres humanos que considero valientes.