Rodrigo Tovar Pupo, alias Jorge 40, exjefe paramilitar, aunque está privado de la libertad, la Fiscalía General de la Nación, sigue tratando de desmantelar la red financiera y los bienes que adquirió y la fortuna que amasó mientras delinquía.
La fortuna de Tovar Pupo consta de ocho haciendas e importantes predios urbanos, dos joyerías en la Isla Margarita de Venezuela, inversiones en la Bolsa de valores de Colombia, tres centros vacacionales, empresas en Costa Rica y Panamá, farmacias, minas de oro en Colombia y Venezuela, así como también, casinos, empresas de transporte, empresas comerciales, casas de cambio, restaurantes típicos, una fábrica de zapatos deportivos en Antioquia, un concesionario de carros y varias estaciones de gasolina.
Además hay varios empresarios vinculados a sus propiedades entre ellos Darío Laino Scopetta, apodado Ojos Azules, dueño de Agro Inversiones Laíno y de la compañía de blindaje de carros Blinco Limitada de Barranquilla.
Las investigaciones de la Fiscalía llevan más de una década intentando descifrar la fortuna escondida del antiguo jefe paramilitar sin mostrar resultados concretos.