El ministro de Vivienda, Ciudad y Territorio, Jonathan Malagón, en su visita ayer a la ciudad de Riohacha, aseguró que junto al gobernador de La Guajira, Nemesio Roys y el alcalde José Ramiro Bermúdez, se está dando la batalla más fuerte que los define como generación y es “la batalla contra la miseria”.
Dicha batalla tiene que ver con los nuevos instrumentos que se trabajaron desde el Ministerio de Vivienda, como lo es el programa Casa Digna Vida Digna, y que en la capital de La Guajira beneficia inicialmente a 366 hogares de las comunas 4,6 y 10, financiado entre el Gobierno nacional y la Gobernación de La Guajira, por un monto de 4 mil millones de pesos.
“Hemos llegado a esas familias que aunque tienen una casa estaban en condiciones de pobreza, les hacía falta la batería sanitaria, el piso, la cocina y difícilmente en años tan complejos como los que vivimos por cuenta de la pandemia se puede ahorrar 10, 12, 15 millones de pesos, para hacer una remodelación parece inverosímil casi que las familias estaban condenadas a no ver sus casas mejoradas”, indicó.
En ese sentido, el ministro de Vivienda aseguró que es ahí donde llega la respuesta de política que no es nada distinto a la conjunción de esfuerzos del Gobierno nacional.
“Mejorar las viviendas es imposible hacerlo desde el Gobierno central, difícilmente se vuelve una realidad sino trabajamos en equipo, y hay algo que me hace sentir orgulloso de mi tierra es que encontré en el alcalde y el gobernador el equipo que necesitábamos para que este proyecto fuera una realidad”, agregó.
Puntualizó que serán más de 350 familias las que van a cambiar por completo su condición de vida con esas intervenciones, reiterando que se va en el camino correcto.
“La felicidad de las familias que ya están recibiendo su beneficio es al final del día la inspiración para llegar a muchas más, la meta durante los próximos meses seguir adelante con el ritmo de ejecución como vamos que estamos saliendo muy bien rápidamente tener los recursos para llegar a las 360 familias”, precisó.