Muchas de las soluciones de agua que se han implementado en La Guajira no funcionan, así lo aseguró en Riohacha el defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, quien recorrió la Alta Guajira para verificar en el terreno si las autoridades están trabajando en la implementación de las soluciones que la Corte Constitucional exige en la sentencia T 302, que declaró el estado de cosas inconstitucionales para el goce de derechos a la alimentación, salud y agua potable de los menores wayuú.
Aseveró que la entidad debe contestar a la Corte los avances de las medidas adoptadas por las diferentes entidades, como el Ministerio de Vivienda, de Cultura, la Unidad de Gestión del Riesgo, la administración departamental, los municipios, entre otras.
Negret Mosquera explicó que existen una serie de proyectos siniestrados que lastimosamente no están funcionando, y por lo que las autoridades deben tomar las medidas disciplinarias y penales que correspondan.
El representante del Ministerio Público dijo también que es necesario capacitar a las comunidades sobre cómo funcionan los molinos y las pilas públicas, porque según su criterio hay formas de como las comunidades wayuú puedan gozar del servicio de agua.
En ese sentido el defensor del Pueblo refirió que las decisiones no se pueden tomar desde Bogotá, sino que “hay que palpar la realidad en el terreno y caminar las trochas”.
“La Guajira es una zona muy rica y lo más importante es que la raza wayuú es muy fuerte y tenemos que apuntalar en lo que tiene que ver con las políticas públicas para tener agua potable, un buen servicio de salud y educación, sin eso es imposible que haya democracia en Colombia, y si no hay democracia es muy difícil que los actores armados entren a ocupar los lugares”, aseveró.
Agregó que es injusto que los niños en la península sigan muriendo por desnutrición, y calificó como escandalosa la cifra de 64 menores fallecidos en el 2018.
“Se tiene que trabajar de la mano con Bienestar Familiar, del Ministerio de Salud, para que miremos las causas de la desnutrición, pero le digo con el corazón y con el alma, vamos a trabajar para que ningún niño en Colombia se muera por desnutrición, no tiene sentido nacer y no poder vivir”, apuntó.
Enfatizó que los servidores públicos deben trabajar para que los niños tengan una buena agua, una mejor calidad de vida “y lo mínimo para vivir, porque ellos no merecen morir”.