Al son de sus composiciones, familiares y amigos, despidieron en el Cementerio Jardines de la Eternidad de Barranquilla, al juglar de los Montes de María, Adolfo Pacheco Anillo.
Desde tempranas horas de la mañana, el cuerpo llegó a parroquia central de San Jacinto, su pueblo natal, hasta donde llegaron sus coterráneos a darle el último adiós. La Alcaldía de San Jacinto decretó cinco días de duelo.
“Tuvimos momento de calidad con él y no nos sentimos insatisfechos del tiempo que compartimos con él”, les dijo a medios de comunicación José Pacheco, un hijo del maestro Adolfo.
Posteriormente, el cadáver fue llevado a la capital del Atlántico, en donde recibió cristiana sepultura.
Acordeoneros como Beto Villa y el Orangel El Pangue Maestre, intérpretes como Poncho Zuleta, Juan Piña, Daniel Celedón, Marcos Díaz y Peter Manjarrés; y compositores de la talla de Roberto Calderón y Rafael Manjarrez, acompañaron la despedida del cantautor.
Temas como ‘La hamaca grande’ y ‘El viejo Miguel’, entre otros, se escucharon una y otra vez en la ceremonia fúnebre.