En estos momentos nos enfrentamos a una crisis obligatoria producto de la pandemia. El pan de cada día en las acciones, decisiones, comentarios y en la vida cotidiana en general, es producto de esta situación; es decir, que nuestra existencia temporalmente gira en función de este suceso inesperado que ha llevado al mundo a repensar su cotidianidad y a crear un nuevo estilo de vida.
Lo que me lleva a realizar el siguiente cuestionamiento ¿la crisis es válida como excusa? Esta es la pregunta que todos debemos interiorizar en estos momentos.
Importante que podamos entender que lo que hoy experimentamos en un acontecimiento para el cual nadie estaba preparado, que la posición frente a la pandemia que tomemos marcará la pauta de nuestra historia, porque lo que estamos viviendo ya nos reseñó y la única salida que tenemos es tomar decisiones serias y responsables que nos ayuden a salvaguardarnos.
En este orden de ideas, lo más sano aparte de cuidarnos, de adaptarnos a la nueva realidad y de crear conciencia que esta situación es real, que nos afecta la salud y en algunos casos nos puede significar perdidas fatales; es vivir la crisis de la manera más positiva que la podamos sobrellevar. No es válido quedarse siendo víctimas de la pandemia y centrar todos los pesares de la vida en ella, no es válido vivir sin ninguna precaución y sin medidas de seguridad pensando que esto solo afecta a los demás, no es válido aprovecharse de las personas que en estos momentos se encuentran en una posición más vulnerable, no es válido generar caos para luego salir siendo los salvadores, no es válido utilizar la crisis como escudo de batalla para sacar a relucir los defectos y malas gestiones, no es válido resistirse al cambio y negarse a aceptar esta nueva realidad.
Hay que entender que la verdadera esencia de las situaciones difíciles está en sacar de ellas lo bueno, lo bonito y de crecimiento, todos deberíamos tener como meta personal salir de esta pandemia siendo mejores personas, porque no estamos exentos de nada, aquí lo material es irrisorio, lo que nos llena y es válido es tener fe, ser empáticos, creer en los demás, ayudar a quien lo necesite, actuar con sensatez, esas son las acciones que en realidad valen la pena, ahora lo más importante es salvar vidas y sobrevivir.
Por eso hoy aplaudo a esas personas que han tomado como excusa válida la crisis para cambiar el mundo, para mostrar su creatividad y demostrar de que estamos hechos, es válido reinventarnos, emprender, seguir trabajando con los debidos cuidados, darlo todo, apoyar, brillar con luz propia, adaptarnos y adoptar un nuevo estilo de vida.
Finalizo dejando otras preguntas que merecen reflexión ¿Cuál ha sido su aporte a la sociedad para superar la crisis? ¿Es usted de las personas que solo espera la vacuna?, serían muchos más los cuestionamientos que tenemos por realizarnos y validar nuestra posición en la vida, pero la idea no es abrumarnos con tantas cosas, sino repensar la forma en la que estamos viviendo, de corazón los invito a generar un espacio de amor propio, a pensar en los demás y a aportar su grano de arena para que con una buena actitud la crisis se supere de la mejor manera.