Cuando de crisis se trata o de crecer se habla, intentamos seguir un camino, explotando nuestros talentos sobre un arte en particular o desarrollando una idea de negocios, que en el inicio es normal sentir miedo, pero que en el proceso se va convirtiendo en algo muy emocionante, por supuesto se requiere también de disciplina, resistencia, estudio, perseverancia, innovación y fe.
Emprender, se convirtió en una actividad económica alternativa muy productiva. Es un dinamizador de la economía y un factor importante, un generador de empleo. Así mismo, es un camino para superarnos y por supuesto es un medio para hacerle frente a la pobreza y a las brechas sociales, aspectos de mucha relevancia, que en nuestro país venimos sufriendo desde siempre y que los gobiernos de turno todavía tienen esa deuda histórica. Emprender, sin duda, es sinónimo de crecimiento que permite transformar escenarios sociales, creando oportunidades donde no las hay.
Este término es relativamente nuevo, pero su historia profunda viene desde hace mucho tiempo, ya nuestras abuelas y madres eran emprendedoras, fueron ellas quienes con sus negocios y fortaleza sacaron adelante a sus hogares, a sus familias, a sus hijos profesionales y trabajadores, hombres y mujeres de bien.
Villanueva se ha venido convirtiendo en un referente del emprendimiento en la región, paisanos de nuestra tierra se han atrevido a dar ese paso con su espíritu emprendedor y visión independiente para crear empresa, donde muchos de ellos se han posicionado en el mercado de manera sostenible y que hoy son referentes para todos, como es el caso de Segura, un emprendimiento que se convirtió en una gran empresa, con sedes en Villanueva y otra en Valledupar, así mismo, es el caso de Roma Pizzería, quien abrió una nueva franquicia en San Juan del Cesar, entre otras empresas, que merecen todo el reconocimiento.
Esta actividad económica que genera empleo y desarrollo social debe ser aprovechada e impulsada por la institucionalidad, entre ellas, los colegios, las universidades, las entidades territoriales en cabeza de sus gobernantes, el Sena, la cámara de comercio, entidades financieras, organizaciones gremiales y sociales, mediante programas de apoyo y financiamiento, jornadas educativas, seminarios y capacitaciones, su inclusión en planes de estudios y pénsum académicos, ya que es importante en este nuevo mundo formar personas desde temprana edad con cualidades empresariales, seguro que ese respaldo institucional que además de ser un deber, tendrá una repercusión positiva en índices de desempleo, en la calidad de vida de la comunidad y el desarrollo económico y social de nuestro municipio. En la actualidad son muchas las personas que quieren emprender, pero necesitan ese empujón de apoyo institucional.
Desde la opinión común, tenemos la perspectiva que para emprender solo se necesitan las ganas y el factor económico, y si, indiscutiblemente se necesitan, pero hay unos componentes que son muy importantes como es la educación y la aplicación de las TIC, dos elementos que complementan esas cualidades natas del emprendedor que son indispensables para tener éxito. Así pues, aplicar conocimientos académicos, estrategias de marketing y sin duda alguna, el aprovechamiento, manejo y uso de las nuevas tecnologías de la información, una herramienta que tenemos a nuestra disposición para mostrar productos y servicios, puede garantizar un buen resultado para atraer usuarios y clientes. A todos estos emprendedores que vienen luchando y liderando esta tendencia, que en un problema ven una solución, que de la frustración encuentran una oportunidad y que los fracasos los convierten en motivación para seguir, felicitaciones y adelante, sigan trabajando, preparándose e innovando, a los que tienen ganas de empezar, el momento es ahora, atrévanse porque si se puede y a las instituciones, es de menester decirles, apoyen estas iniciativas.