La mayoría de los titulares asignados por nuestros colegas columnistas y no menos caprichosos por los que hemos considerado de nuestra autoría, son relevantes, hagamos un esfuerzo en pensar en calificativos que estén íntimamente ligados con la temática que hemos concebido como estudio, investigación y conocimiento real de las cosas.
Es por ello que reitero que mientras mayor sea nuestra investigación más fructífera será la riqueza de nuestros conocimientos.
No se adelante a escribir un solo renglón si antes no ha escogido el tema que desea brindar a los lectores. Mientras usted sea conocedor del tema a tratar se presume que puede manejar un lenguaje sencillo y enrumbar el tema dentro de un ambiente comprensivo y emprendedor.
Cuando se le ocurra escribir sobre la geografía, historia y tradición de determinado lugar del planeta, al decir, del poeta Jemaca, estudié la realidad de las cosas y cuando se refiera a extensión, número de habitantes e historia en general, el lugar escogido, piense que ha debido ser responsable investigando con anterioridad la realidad de los hechos.
Domine con exactitud los datos, motivo de investigación, toda vez que con anterioridad conoce la realidad de los hechos y no afirme nada que más tarde le traiga duda e incertidumbre.
Los temas relacionados con tragedias, delincuencias, políticas mal enrumbadas y no como debiera ser: “política, arte, opinión o doctrina referente al gobierno el Estado, deben ser tratados con certezas y sabidurías”.
Cada vez que usted ha seleccionado un artículo relacionado con la ley, la autoridad, el gobierno o la administración de empresas, esté seguro de cada tema en particular.
Es mejor escoger un solo tema: Su origen, su etimología, su significado. Si se trata de una biografía, esté seguro que conoce el personaje. Si se trata de un héroe de la patria es mejor referirse a uno solo. Ejemplo: Simón Bolívar, Antonio Nariño, Francisco de Paula Santander, Camilo Torres, Policarpa Salavarieta, o cualquier personaje de la historia.
Lea con fines investigativos acerca de nuestros héroes y heroínas que lucharon entregando sus propias vidas, en beneficio de la libertad de nuestra patria para hacerla cada vez más libres
El reconocimiento, la gratitud y el permanente agradecimiento de parte nuestra, nos hace entender que tanto el lector como quien escribe, aportan conocimientos en beneficio de la humanidad y en particular. Estudiemos los fines investigativos buscando siempre la verdad escondida, fácil de encontrar.
Otra cosa de suma importancia es la denominación del título del artículo escogido. O de la enseñanza. La correcta utilización de los términos empleados conociendo de antemano su significado, nos permite darnos a entender por quienes se han dado a la tarea de entendernos.
Procura siempre que exista una verdadera relación entre el escritor y el ocasional lector. Cada vez que logramos comprender lo que usted ha querido manifestarnos y la comprensión de nuestra parte el sentido que le ha dado a su escrito, nos toca, hablando en lenguaje de comunicación decir: Estamos en perfecta sintonía. Me he preocupado en que mis temas sean de fácil entendimiento, ya que mi sano propósito es darme a entender sin rimbombancia y con lenguaje sencillo y comprensivo.
Cada vez que escribo, escojo un tema de fácil ocurrencia. Sus respectivos conceptos enriquecerán cada vez más, mis próximos temas que guardan en latencia un titular que amerita las tres lecturas que ordena ‘Técnicas de la Comunicación’.