El lugar de nacimiento de Calixto Rafael Mindiola Carrillo hace parte de las doce comunidades que integran el resguardo indígena kankuamo, ubicado exactamente en la vertiente suroriental de la Sierra Nevada de Santa Marta, en el departamento del Cesar, se llama: Atánquez. Es un corregimiento del municipio de Valledupar, pueblo encantador, de geografía quebrada, pero con un agradable clima, produce café, caña, panela, y cultivos de pancoger.
La fecha de su llegada al mundo fue el 31 de mayo de 1960; proviene del matrimonio conformado por Juan Francisco Mindiola Arias y Mercedes Elena Carrillo Oñate. Sus hermanos de mayor a menor son: Betsy, Jesús, Johnny, Euber, Alfredo, Julio, Rubén y Jose Mindiola Carrillo; ocupa el sexto lugar entre los nueve.
Infancia
Calixto Mindiola pasó su infancia en su bella tierra natal. En época de vacaciones se trasladaban a una finca cafetera que tenía su padre, se convirtió junto a sus hermanos en un experto recolector de café, producían panela, limpiaban también la rosa, donde se cultivaba yuca, guineo, plátano, dominicos, ahuyama, frijol, etc.
Los fines de semana, junto a familiares y amigos se reunían en casa de sus padres o en la de cualquier pariente o vecino a observar a su papá que era un gran guitarrista interpretar junto a otros músicos hermosas melodías con este bello instrumento que lo enamoró desde muy niño. De esta manera, mirando a los mayores, poco a poco fue aprendiendo tanto él como sus hermanos, cómo se tocaba aquel aparato de cuerdas denominado guitarra.
‘Cali’, nuestro invitado, le fue cogiendo el tirito a la cosa, nos dice jocosamente, viendo también a Hugues Martínez, excelso guitarrista, paisano y pariente suyo, hasta que aprendió.
Una acotación importante por parte de ‘Cali’ Mindiola. Nos dice que la música de guitarra llegó al pueblo de Atánquez por conducto de la Iglesia Católica, pues la mayoría de los sacerdotes que llegaban eran músicos, la tocaban y la sonaban en las misas y diferentes celebraciones religiosas, por ello opina con propiedad que el fuerte de Atánquez no son los acordeoneros, son los guitarristas.
Su primaria la estudió en la Escuela Parroquial de Atánquez. La terminó en 1975. En 1976, un tío que residía en San Juan del Cesar, La Guajira, llamado José Agustín Carrillo Oñate lo invita a que inicie su bachillerato en ese próspero municipio. Se matriculó en el Colegio San Juan Bautista, del profesor Carlos Ariza Molina, al que todos llaman por cariño ‘Pelongo’. Estudió en este plantel hasta tercero de bachillerato. Se trasladó a Valledupar con la intención de estudiar en el prestigioso Colegio Nacional Loperena y para la consecución del cupo pensó en tocar las puertas del dirigente político Manuel Germán Cuello Gutiérrez, quien era buen amigo de su padre, pero cuando el rector, Antonio Serrano Zúñiga, se enteró en la entrevista que le hizo, que tocaba la guitarra, le ordenó enseguida que fuera a la secretaría del colegio a matricularse, Él también era músico, compositor y no quería desperdiciar la oportunidad de que su plantel contara con un talentoso guitarrista dentro de su alumnado.
Cursó cuarto, quinto y sexto de secundaria en esa institución. Es bachiller lopereno 1981. Culminó junto con su hermano Julio. Decidió quedarse trabajando y no fue a la universidad, mientras que su hermano se fue a Barranquilla y estudió Derecho. El enfoque de ‘Cali’ era la música, desde el Loperena se conoció con mucha gente vinculada al gremio del folclor, entre otros con Iván Ovalle Poveda, cuando aún no era un compositor reconocido.
Cómo nacieron Los Kankuis
Su origen fue en el salón de clases del Loperena, la materia español tenía todos los viernes un evento al que llamaban centro literario, y era calificable. Los hermanos Mindiola participaban activamente. ‘Cali’ en la guitarra y Julio cantando; los compañeros los buscaban para hacer parte del conjunto, “pues con esas presentaciones teníamos asegurado un 5”, la mayor calificación en el año 1980, fin de año, etapa de grados, y precisamente, el sexto que se graduaba “nos llamaban para que le amenizáramos una fiesta en la caseta ‘Brobley’ que existía en Valledupar en ese tiempo, con el fin de recolectar fondos para el grado, fue un total éxito, desde ese momento todos los colegios nos contrataban, el Femenino, la Sagrada Familia, el Ateneo, mejor dicho, nos pusimos de moda en Valledupar”.
Los bazares de los colegios los amenizaban Los Kankuis, esta es una palabra kankuama de Atánquez, significa ‘clan familiar’.
La familia de ‘Cali’, principalmente su padre, tenía estrechos vínculos con la gente de La Junta y La Peña, departamento de La Guajira. En 1978 se presentaron en el Festival Folclórico del Fique. “Mi papá”, anota ‘Cali’, “le compuso una canción, a un grupo de amigos de La Junta. Cuando llegaban recibían atenciones por doquier, les tocaba turnarse, se peleaban para complacerlos. Permanecían en este bello pueblo, generalmente era en época de Carnaval o de Festival, esta hermosa inspiración lleva por título ‘La barra juntera’ y ganó el primer puesto en el concurso de la Canción Inédita del Festival del Fique en el año 1978. El premio en ese momento eran $10.000, los organizadores de ese festival fueron: Rubén Darío Araújo y HernánAcosta Solano, recuerda ‘Cali’ Mindiola.
Calixto Rafael Mindiola, como pocos le llaman, está felizmente casado con Diana Isabel Rodríguez Bracho, administradora de empresas de profesión. De ese bonito hogar nacieron dos hijos: José Calixto y Juan Felipe Mindiola Rodríguez.
En 1987, ‘Cali’ fue invitado por Iván Villazón y ‘El Chiche’ Martínez a su conjunto. Anduvo con ellos en todas sus presentaciones. Ese mismo año se presentó al Festival Vallenato en Guitarra que se celebra en Codazzi, y ocupó el dignísimo primer lugar, es el primer rey de dicho festival.
En 1988 se encuentra por casualidad con Diomedes. Estaba tocando en ese momento con ‘Juancho’ Rois. Era la segunda unión con este artista, lo invita a que lo acompañe a su presentación en la caseta ‘Aguardiente Antioqueño’ y le advirtió que por favor se llevara la guitarra. Al ‘Cacique’ le gustó su estilo para tocar dicho instrumento. Precisamente, el conjunto viajó a Bogotá a grabación y lo invitaron, ‘Cali’ fue quien hizo la bonita introducción al tema de ‘Chuto’ Díaz, ‘Déjame llorar’.
Entre 1990 y 1991 fue invitado por el Canal Caracol para intervenir con su guitarra en la gran producción ‘Escalona’.
Continúa trabajando con Los Kankuis y llegó la hora de grabar el primer trabajo discográfico, con esta, su adorada agrupación, ha grabado tres álbumes, aparte de varios mosaicos navideños. Con Iván Villazón hizo también un en vivo y luego un CD completo, todo en guitarra, el cual ha tenido mucha aceptación.
Reconocimientos
La Fundación Festival Vallenato, en una oportunidad, le otorgó la máxima condecoración que se otorga a un artista que se destaque en el folclor: ‘Medalla Consuelo Araujo Noguera’. Para la entrega de este galardón realizaron un evento especial homenajeando a Los Kankuis en su patria chica, Atánquez. Llevaron a Los Hermanos Zuleta para amenizar el evento.
Anécdota con ‘El Cacique’
“Una vez que íbamos a tocar en Fundación, Magdalena, trabajando como guitarrista del conjunto del monstruo del vallenato, éste decidió enviar el bus delante, y le dijo al conductor que nos trasladara hasta la caseta”, dice ‘Cali’, y recuerda que entrando a la población se paró en el centro del bus y con voz alta dijo: “Vamos a esperar al ‘Cacique’ aquí en la estación de servicio que está ubicada en la entrada del pueblo, pues qué tal que el hombre no venga y nos vaya a agredir la gente. Evitemos una vaina, bastante tarde, casi a las 3:00 a.m. apareció ‘El Cacique’ y se subió al bus con enojo, y gritó ‘¿Quién fue el autor de esto?”. Miró a todos los integrantes de la agrupación, pero concentró su mirada en ‘Cali’, quien pensó para sus adentros, “’ñerda’ la va a cogé conmigo el hombre y cuando se bajó les dijo ojalá nos paguen sinvergüenzas, no tuvimos más, sino echarnos a reír”.