Miguel Felipe Aragón dentro de pocos días asume el cargo de Maicao, en un marco enrarecido de incertidumbres por las recientes elecciones, pero también de esperanzas de los ciudadanos que vienen de un Gobierno que les causó inmensa decepción y fallidas expectativas.
Su Gobierno comienza con serias amenazas y ese será su primer reto. Mantenerse concentrado en ejercer gobernabilidad mientras afronta jurídicamente la demanda instaurada ante el Tribunal Contencioso Administrativo de La Guajira y que pide la nulidad de su elección. Miguel Felipe tendrá una veeduría permanente sobre su Gobierno, una revanchista, sistemática y cargada de odios insepultos. Recordemos que no se ha posesionado y ya Santa Lopesierra anuncia campaña de revocatoria apenas cumpla un año. Lo que se presagia es un monitoreo permanente de la contratación y las acciones de Gobierno para ‘tumbarlo’ al primer resbalón. El Cecop, tendrá ojos vigilantes para buscarle la caída, así que, su gran reto es sostenerse en el cargo y no dar papaya.
Es la primera vez que un alcalde asume sin haber obtenido la mayoría de votos, pues es de todos conocidos que el voto en blanco superó la cifra obtenida por Aragón. Eso impone otro reto: unir a los maicaeros y que se sientan interpretados en sus aspiraciones de gobernanza. El actual alcalde enfrenta ya no una sola fuerza de oposición como los anteriores, sino una pluralidad de vertientes, algunas de las cuales han demostrado ser despiadadas cuando hacen oposición.
El alcalde electo es el primer wayuú que llega al cargo desde que se elige democráticamente esa investidura. Miguel Felipe, siendo diputado, fue uno de los líderes de algunos de los bloqueos de carreteras con la bandera de luchar contra el abandono estatal para las necesidades de los wayuú. Ahora será el encargado de desmontar esos bloqueos, de hacerle sentir a los wayuú que tienen un alcalde comprometido con sus altas demandas de redención.
Hay obras esperando salir del estado de elefante blanco, el centro administrativo, el parque del barrio Santa Fe, algunas otras que anunció el actual alcalde y que apenas inician. Los maicaeros deben recordar a Miguel Felipe por una gran obra y no por remodelar parquecitos, construir un aula en una escuelita o trazar cuatro cuadras de pavimento. Vamos a ver cuáles serán las obras de gran impacto con las que lo van a recordar.
No menos importante es limpiar la imagen de corrupción que deja el anterior Gobierno. Una de las primeras acciones de Miguel Felipe tiene que ver con el tránsito municipal. Uno de los factores que más influyó en la pérdida temprana de la luna de miel de Dassuki con la ciudadanía es la imagen que proyectan los servidores del Instituto de Tránsito. Cualquiera que entre a Maicao, ya sea por la vía a Riohacha, Valledupar o Venezuela, se entera que está entrando a un municipio corrupto. Con todo el descaro del mundo (y soy testigo casi a diario de esto), los reguladores de tránsito montaron ‘peajes’ en los que, si no se tienen todos los documentos en regla, se debe pagar una ‘picada’ o ‘liga’.
Salir o entrar a Maicao se volvió una tortura extorsiva, en especial, para los conductores wayuú cuyos vehículos no siempre cumplen con todo lo que exigen los ‘reguladores’ a los que nunca se han visto regulando la caótica circulación en el centro y mercado de la ciudad. Una oficina de tránsito que no regula la circulación, que no ha instalado ni un semáforo, ni una sola señal y que solo decomisa vehículos y extorsiona a los conductores, es lo menos que necesita Miguel Felipe para mantener una buena imagen entre los maicaeros. Lo invito a que desmonte esos ‘peajes’.
Los trabajadores de la cultura esperan un Gobierno que le dé valor a la dimensión simbólica, al quehacer estético y a los procesos formativos. Nefasto Gobierno; cuatro años para olvidar que la administración de cultura es el balance que me dan los cultores y gestores de Maicao. Son muchos más los retos del alcalde, potro poco domable que es Maicao para gobernar, así que solo con preparación, buenos aliados, inteligencia política, obras de impacto y transparencia podrá Miguel Felipe alcanzar la luz al final de túnel.