Una noche de pánico vivieron los habitantes del municipio de Silvia, en el departamento del Cauca, tras un violento ataque armado contra la estación de Policía local, presuntamente perpetrado por miembros de la columna móvil Dagoberto Ramos, una estructura perteneciente a las disidencias de las Farc.
El hostigamiento, que se inició alrededor de las 11:40 p. m. del martes 22 de abril y se extendió por más de una hora hasta pasada la 1:00 a. m. del miércoles, dejó al casco urbano completamente paralizado. Según denuncias de la defensora de derechos humanos Viviana Vargas Ávila, durante ese lapso se escucharon al menos seis explosiones y múltiples ráfagas de disparos, sumiendo a la población en el miedo y el confinamiento.
Imágenes difundidas en redes sociales muestran a los atacantes desplazándose armados por las calles del municipio, generando terror entre los habitantes, quienes se resguardaron en sus viviendas. Testigos reportaron que los disparos provenían de diferentes puntos estratégicos, incluyendo una iglesia cercana a la estación, lo que evidencia la planeación del ataque. Hasta el momento no se ha confirmado si hubo personas heridas o si se presentaron daños materiales significativos.
La defensora Viviana Vargas advirtió que estos hechos no pueden considerarse aislados, señalando que la violencia en la región es constante y requiere de respuestas contundentes por parte del Gobierno nacional y local. “La vida de la población civil en Silvia está en riesgo”, alertó.
Las autoridades aún no han emitido un informe oficial sobre lo ocurrido, mientras la comunidad permanece en alerta por la posible repetición de este tipo de acciones armadas.