Un reciente estudio reveló la dura realidad que enfrentan las trabajadoras domésticas en Colombia, quienes soportan jornadas laborales de hasta 11 horas diarias y, en muchos casos, perciben salarios que no alcanzan ni el 50% del salario mínimo legal. Este sector, compuesto en un 98% por mujeres, en su mayoría cabezas de hogar, sigue siendo uno de los más vulnerables del país.
El informe titulado ‘Propuestas para la Formalización del Trabajo Doméstico en Colombia’, elaborado por la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario y la Corporación para el Desarrollo de la Seguridad Social (Codess), pone en evidencia que más de 800.000 personas se dedican a este tipo de labor en el país, pero sus condiciones de trabajo siguen siendo precarias.
Según Darwin Cortés, profesor e investigador de la Universidad del Rosario, la situación es aún más crítica en las zonas rurales, especialmente en departamentos como Antioquia, Santander y Cundinamarca. “El 65% de las trabajadoras rurales gana menos de la mitad del salario mínimo legal y solo el 30% tiene acceso a seguridad social”, afirmó Cortés.
La situación no es mucho mejor en las principales ciudades del país. En Bogotá y Medellín, el 70% de las trabajadoras domésticas carece de seguridad social y el 40% reporta ingresos por debajo del salario mínimo. Esto significa que 40 de cada 100 trabajadoras en estas urbes viven con ingresos que no alcanzan para cubrir sus necesidades básicas.
A esto se suma la informalidad y la falta de inspección laboral, lo que perpetúa la vulnerabilidad del sector. Jhon Marulanda, investigador de Codess, destacó que muchas trabajadoras deben enfrentarse a largos desplazamientos, estrés laboral y estigmatización.
El informe sugiere que la clave para mejorar esta situación es la formalización del trabajo doméstico. Entre las propuestas figuran el fortalecimiento de la inspección laboral, el fomento de la afiliación sindical y el uso de herramientas tecnológicas como ‘DigniHogar’, que facilitaría la formalización de contratos y la inclusión en la seguridad social.
Este estudio pone en evidencia la urgente necesidad de medidas concretas que garanticen condiciones laborales dignas para las trabajadoras domésticas en Colombia.