La senadora María Fernanda Cabal, del Centro Democrático, lanzó fuertes críticas contra el embajador de Colombia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Armando Benedetti, por presuntos gastos excesivos durante su gestión. Según Cabal, Benedetti ha incurrido en gastos que, a su juicio, son desproporcionados e injustificados.
Cabal, quien respaldó sus acusaciones con documentos, aseguró que Benedetti ha recibido $518 millones por sus servicios desde que asumió el cargo el 8 de febrero, pero sus gastos ascienden a $1.200 millones. La senadora señaló como ejemplo el alquiler de su residencia en Roma, autorizado por el Gobierno, cuyo costo inicial fue de 10.000 euros mensuales (aproximadamente $46 millones), cifra que aumentó significativamente a partir del 30 de abril de 2024.
El nuevo contrato de arrendamiento, según Cabal, establece un pago anual de 136.800 euros, equivalente a $639 millones colombianos, lo que representa un total de $2.556 millones por los cuatro años de alquiler de la vivienda del diplomático. Además, la senadora denunció que se pagó una comisión de 13.200 euros ($61 millones) por la gestión del nuevo contrato.
La senadora también señaló gastos adicionales, como el alquiler de un vehículo por cuatro días, cuyo costo ascendió a 3.290 euros ($15 millones). «La hora del alquiler de este vehículo sale a 39,6 euros, es decir, $181.267 pesos colombianos», detalló Cabal, quien calificó estos gastos como innecesarios y excesivos.
La situación de Benedetti, además, ha estado marcada por diversas controversias. Aparte de las acusaciones de Cabal, el embajador enfrenta una investigación disciplinaria por parte de la Cancillería debido a un presunto caso de violencia intrafamiliar contra su esposa, Adelina Guerrero, ocurrido en su residencia en Madrid; a esto se suma una demanda en curso ante el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, que busca su destitución por no cumplir, presuntamente, con los requisitos establecidos en el manual de funciones para su cargo.
A pesar de las múltiples críticas e investigaciones en su contra, Benedetti sigue en funciones como embajador ante la FAO.