Según un estudio de BBVA Research publicado durante el cuarto trimestre del año pasado los sectores que mejor han soportado el primer embate del coronavirus en Colombia (no olvidemos que nuestra sociedad y nuestro tejido productivo todavía pueden ser golpeados por nuevas olas del virus y que todavía debemos capear la crisis financiera, ya que esta va llegando de forma escalonada) son el sector agropecuario, el inmobiliario y el gubernamental, sector este último que tendrá que tirar del carro durante los próximos meses, al igual que está ocurriendo en todos los países del mundo que aún están siendo golpeados por la pandemia, que por otra parte son mayoría.
Un peso más fuerte en una balanza comercial deficitaria
A falta de los datos completos de 2020 el instituto nacional de estadística nos dice que en el periodo que va de enero a noviembre del año pasado Colombia registró un déficit comercial de más de 9.200 millones de dólares, mientras que el año anterior, el 2019, el déficit total superó los 11.800 millones de dólares, así que a pesar de que podría parecer que la economía colombiana es netamente exportadora (sobre todo en mercaderías con un valor añadido relativamente bajo, como las producidas por el sector agropecuario) lo cierto es que se importa más de lo que exporta, así que el fortalecimiento paulatino del peso colombiano frente al dólar estadounidense durante la segunda mitad de 2020 debería ser más beneficioso que perjudicial, a pesar de que las causas sean mayormente exógenas al país (el dólar ha venido perdiendo valor frente a otras grandes divisas mundiales e incluso frente a divisas como el peso mexicano, por causas que todavía causan controversia entre los analistas; el desafío de China, la fuerte polarización política de los EEUU…)
Aunque dependiendo de cuál sea la actividad económica a la que uno se dedique es más o menos relevante que las divisas suban o bajen (por ejemplo, operando trading de forex con una plataforma como la de Plus500 en español no es requisito que la divisa de un par suba, sino estar posicionado adecuadamente, además de tomar en cuenta el riesgo que suponen el apalancamiento y la volatilidad) para algunos sectores económicos nacionales y grupos de ciudadanos sí es altamente positivo que el peso colombiano se haya recuperado de las fuertes caídas experimentadas en marzo de 2020, evidentemente a los importadores les conviene (que como ya se ha visto según cifras oficiales el sector importador es mayor que el sector exportador), ya que permite convertir los pesos colombianos en más dólares con los que comprar fuera (el dólar todavía puede considerarse la divisa mundial) y para los que ahorran en dólares o los compran esperando a que suban para obtener más beneficios es conveniente por la misma razón; la misma cantidad de pesos se traduce en más dólares.
Y si de un sector enfocado a la exportación se trata, no se puede obviar a la industria petrolífera.
Inversión en la industria de hidrocarburos para el 2021
Según un informe de la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP), la inversión tanto en la exploración como en la producción de hidrocarburos para el presente año será más de un 50 por ciento superior a la efectuada durante el 2020, de la cual, hasta el 45 por ciento de la parte destinada a la exploración se dedicará a la búsqueda de nuevos yacimientos gasísticos, ya que según explicó el presidente de la ACP, Francisco José Lloreda “El gas natural toma cada vez más fuerza en la matriz energética, por eso no sorprende que su participación venga creciendo en los últimos años. Colombia tiene potencial geológico…”. Por lo tanto, de resultar en búsquedas exitosas requerirá de más inversión para poner en marcha nuevas y rentables explotaciones (la misma asociación recuerda en la introducción al informe que hasta el 17 por ciento de los ingresos fiscales del gobierno central provienen de los hidrocarburos), que, efectos ambientales aparte, además deriva en empleo de calidad y alta cualificación.
Aunque sí se puede incluir al sector petrolero en aquellos que cimentarán la recuperación colombiana, también se debe tener en cuenta que ha sido de los más golpeados, sin ir más lejos la inversión cayó con fuerza durante el 2020, algo crítico para una industria que necesita de constantes inversiones para seguir funcionando, por lo que todavía es pronto para saber el impacto real de las inversiones tras un muy malo 2020.
