El Banco de la República reveló un informe que destaca que el 79% de los pagos en Colombia todavía se realizan en efectivo, con un promedio diario de $40.000 por persona.
A pesar de un aumento en la apertura de cuentas de ahorro y crédito en los últimos años, el efectivo sigue siendo el método de pago predominante en ciudades como Medellín, Cali y Barranquilla, donde supera el 70%. Una encuesta realizada por la entidad reveló que el 17,4% de los encuestados considera que pagar en efectivo es más fácil.
Le siguen quienes lo hacen por costumbre (15,5%) y quienes mencionan que las compras son de bajo monto (11,3%). En Medellín, una de las principales razones para optar por el efectivo es la percepción de que resulta más barato que otros métodos de pago.
En Cali, por su parte, se valora el manejo del efectivo como menos riesgoso. El estudio también muestra que el uso de efectivo es mayor entre personas de bajos ingresos, particularmente en aquellos que ganan menos de un salario mínimo, donde el 87,5% aún utiliza esta modalidad.
A medida que los ingresos aumentan, el uso de efectivo disminuye y crece el empleo de otros instrumentos de pago, como tarjetas y transferencias. Colombia es el tercer país en América Latina con mayor uso de efectivo, solo superado por México y Perú, según datos de Bain & Company.
Este fenómeno refleja tanto las barreras culturales como la falta de inclusión financiera en algunos sectores de la población, a pesar de los avances en tecnología y servicios bancarios en el país.