Este martes el canciller Carlos Holmes Trujillo denunció que la llegada de las aeronaves extranjeras al vecino país no contó con la aprobación de su Asamblea Nacional. Además el alto funcionario aseguró que detrás hay una intervención militar rusa en Venezuela.
«Expresamos nuestra más profunda preocupación y rechazo por el arribo de dos aeronaves militares rusas a Venezuela, en momentos en los que ese país atraviesa una grave crisis multidimensional que el régimen ilegítimo de Maduro se niega a afrontar, y ante la evidencia sistemática de que dicho régimen no duda en emplear la represión para perpetuarse», aseguró el canciller Trujillo.
Además el encargado de las relaciones exteriores agregó que «la presencia de efectivos militares y transporte militar constituye un acto lesivo de la soberanía venezolana».
Ante las acusaciones en su contra, el gobierno de Vladimir Putin se defendió explicando que la llegada de sus hombres a la nación sudamericana corresponde a un acuerdo de cooperación firmado hace 18 años.
«La presencia de especialistas rusos en territorio de Venezuela es regulada por el Acuerdo de Cooperación Técnico-Militar suscrito en mayo de 2001 por los Gobiernos de Rusia y Venezuela y que fue ratificado en su momento por ambos países», dijo la portavoz rusa Maria Zarajeva en un comunicado.
La funcionaria agregó que dicho acuerdo no precisa de una aprobación adicional de la Asamblea Nacional para instalar a tropas rusas en Venezuela.
Sin embargo, las explicaciones rusas no han evitado que Estados Unidos emita su voz de condena al aterrizaje de los aviones.
«La inserción continua de personal militar ruso para apoyar el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro en Venezuela pone en riesgo que se prolongue el sufrimiento del pueblo de Venezuela que respalda de forma apabullante al presidente interino Juan Guaidó», dijo el Secretario de Estado de EE.UU Mike Pompeo.