La Universidad estadounidense de Colorado State (CSU), dio su pronóstico sobre la próxima temporada de huracanes en el océano Atlántico, declarando que piensan que será una temporada muy ocupada.
De acuerdo al informe, el promedio de tormentas nombradas en el Atlántico es de 14 cada temporada. De aquellas, 7 se convierten en huracanes, de las cuales 3 avanzan a ser un huracán de categoría mayor (categoría 3 y más). El pronóstico de la mencionada universidad, es considerablemente sobre el promedio. Ellos creen que verán 23 tormentas nombradas, 11 huracanes y 5 huracanes de categoría mayor.
Temperaturas oceánicas muy altas en el Océano Atlántico, Mar Caribe y Golfo de México y la probable formación del fenómeno de La Niña para el segundo semestre aumentarían está actividad ciclónica.
¿Una temporada activa?
Sobre el pronosticador principal en CSU, el doctor Klotzbach, dice que es por dos razones principales. Temperaturas de la superficie del mar por encima de lo normal y condiciones de La Niña que se anticipan este verano. El agua cálida añade más energía a los trópicos, lo que crea la energía para estas tormentas. Pero quizás lo más importante es que La Niña generalmente reduce la cizalladura vertical del viento.
Los vientos que soplan a través de un sistema tropical maduro pueden impedir que se desarrolle un sistema y debilitar las tormentas más fuertes. Esto reduce el número total de tormentas. Pero cuando se dan las condiciones de La Niña, la cizalladura del viento muchas veces se reduce. Eso, en conjunto con las cálidas temperaturas de la superficie del océano, es la razón por la cual el dr. Klotzbach cree que se formarán más tormentas de lo normal.
La previsión del CSU es entre un 170% y un 180% de lo normal. Entonces, ¿cómo sería una temporada tan ocupada como ésta? Esa es una pregunta muy difícil de responder porque no hay manera de saber a dónde irán todas estas tormentas. La mayoría podrían permanecer en aguas abiertas o apuntar al Caribe, la costa esta o el Golfo de México.
Por ejemplo, la temporada de huracanes del Atlántico de 2010 tuvo 19 tormentas con nombre, 12 huracanes y 5 grandes. Bastante cerca de lo que anticipa el CSU. Sin embargo, aún con tantas tormentas, Houston/Galveston no recibió ni una gota de lluvia de ninguna de ellas.
Lo más importante es mantenerse atento al pronóstico del tiempo. Durante la temporada de huracanes, observe el clima al menos una vez al día. Las cosas pueden cambiar e intensificarse rápidamente. No siempre se recibe un aviso de varios días. Los fenómenos ambientales afectarán sobre todo a la costa continental de Estados Unidos y el Caribe.
Fenómeno de El Niño
Este fenómeno climático natural se caracteriza por un aumento en las temperaturas de la superficie del mar que el promedio en el Océano Pacífico central y oriental. Generalmente, ocurre cada dos a siete años y sus impactos se extienden a lo largo de los países costeros del Pacífico.
Las consecuencias de ‘El Niño’ son diversas y pueden afectar de distintas maneras. Explican científicos que, dependiendo de su fuerza, “puede aumentar el riesgo de fuertes lluvias y sequías en ciertos lugares del mundo”.
Este fenómeno ambiental está muy relacionado con el registro de temperaturas récords en distintos países, sobre todo en aquellos que ya experimentan temperaturas superiores al promedio, así como también un aumento en la intensidad de las precipitaciones. Por sus características, durante El Niño también puede haber una modificación en el promedio de los huracanes en el Océano Atlántico, el Mar Caribe y el Golfo de México.
Para predecir este fenómeno cíclico, los científicos miden diversos factores. Algunos de ellos son: la velocidad de los vientos alisios y las temperaturas de las aguas de los océanos, tanto en la superficie como en las profundidades.