Los obstáculos de acceso continúan comprometiendo gravemente la capacidad de los humanitarios para llegar a las personas en Gaza, dijo UNRWA.
Según la Oficina de Coordinación Humanitaria de la ONU (OCHA) desde el 1 de marzo, el 30% de las misiones de ayuda humanitaria al norte de Gaza han sido denegadas por las autoridades israelíes.
La UNRWA se ve desproporcionadamente afectada después de que las autoridades israelíes hayan rechazado dar a la agencia acceso al norte de Gaza para entregar asistencia alimentaria de emergencia desde la semana pasada.
No ha habido cambios significativos en el volumen de suministros humanitarios que ingresan a Gaza o en el acceso mejorado al norte, informó UNRWA, señalando que del 1 al 30 de marzo, un promedio diario de 159 camiones de ayuda han cruzado hacia Gaza por día.
Antes de la guerra, unos 700 camiones de entrega ingresaban a Gaza diariamente.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU está proporcionando alimentos desesperadamente necesarios a 1,45 millones de personas en Gaza, pero dice que «no es suficiente».
«Sin un alto el fuego y un acceso completo, las vidas están en riesgo», dijo la agencia de la ONU.
De acuerdo con las Naciones Unidas, ante los obstáculos a los envíos de alimentos que Israel impone en los cruces fronterizos hacia Gaza y que retrasan su entrega durante semanas, muchas naciones están tratando de suministrar la ayuda por vía aérea, lo que ha provocado la reciente muerte de más de una docena de palestinos, según noticias procedentes de la región.
Según las informaciones, las víctimas murieron ahogadas mientras intentaban recuperar paquetes de alimentos del mar o fueron golpeadas fatalmente por cajas de ayuda de ayuda cuando caían.
Al mismo tiempo, las agencias de la ONU en el terreno en Gaza indican que continúan los ataques aéreos y bombardeos.
Esto se suma a los cada vez más fuertes llamados a un alto el fuego humanitario inmediato y para que Israel cumpla tanto con una resolución del Consejo de Seguridad para un cese de hostilidades durante el Ramadán, que termina el 10 de abril, como con las órdenes de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) del jueves pasado, pidiendo al país que respete sus obligaciones como signatario de la Convención de Genocidio y abra los cruces fronterizos para permitir suficiente ayuda hacia el enclave.
En su último informe de situación, la agencia para los refugiados palestinos (UNRWA) dijo que las Fuerzas de Seguridad Israelíes continuaron las operaciones militares en toda la Franja de Gaza, lo que resultó en más víctimas civiles, desplazamientos y destrucción de viviendas y otra infraestructura civil.
Los ataques israelíes han matado a más de 32.000 personas en Gaza, han causado más de 75.000 heridos, han desplazado a 1,9 millones de personas y han llevado al hambre a 2,2 millones de personas desde que comenzó la guerra en octubre, después de una incursión liderada por Hamas en Israel que dejó casi 1200 muertos y más de 240 tomados como rehenes.
Los ataques aéreos y el bombardeo continuaron en el norte de Gaza, Jan Yunis y Rafah, donde la UNRWA estima que ahora viven un total de 1,2 millones de personas, la gran mayoría en refugios formales e informales, informó la agencia de la ONU.
Más de 100 escuelas de UNRWA han sido alcanzadas directa o indirectamente, y algunas han sido gravemente dañadas. Muchas se han utilizado como refugios para familias desplazadas desde que comenzó la guerra.
«Ningún lugar es seguro en la Franja de Gaza. Esta es una guerra contra los niños. Contra su infancia y su futuro. ¡Alto el fuego ahora!», pidió la UNRWA en las redes sociales.