Israel confirmó este martes un ataque al campo de refugiados de Jabalia, en el norte de Gaza, en el que mató a un comandante y varios miembros de Hamás. Pero también dejó decenas de muertos y heridos, según las autoridades palestinas.
El Ministerio de Salud de Gaza y el cercano Hospital Indonesio, donde fueron trasladados la mayoría de los heridos, contabilizaron al menos 50 fallecidos, mientras la agencia francesa AFP confirmó al menos 47 a partir de las imágenes del suceso.
El Ministerio de Exteriores en Ramala (Cisjordania, el otro territorio palestino además de Gaza) indicó posteriormente que los muertos y heridos en conjunto superan los 400, parte de ellos mujeres y niños.
Las autoridades palestinas compararon el ataque de este martes con la explosión en el hospital Al-Ahli, en el centro de la ciudad, el pasado 17 de octubre, en la que cuantificaron los muertos en unos 500.
El gobierno de Gaza, en manos de la organización islamista radical Hamás, atribuyó la nueva explosión a un ataque aéreo israelí.
Su portavoz, Daniel Hagari, explicó que aviones de combate israelíes atacaron el campo de refugiados, donde mataron a un alto comandante de Hamás y provocaron el colapso de infraestructura subterránea del grupo que controla Gaza.
Yemen declara la guerra a Israel
Yemen se suma a la guerra contra Israel con tres ataques con misiles y drones “en apoyo” a la población de Palestina y de toda la Franja de Gaza.
El grupo Hutíes reivindicó los ataques y advirtieron que “continuarán” con los bombardeos hasta que el ejército israelí abandone Gaza.
En un comunicado televisado, el vocero militar de los Hutíes, Yahya Sarea, aseguró que es la tercera operación que cometen contra Israel para apoyar a Palestina.
“Con la ayuda de Dios Todopoderoso, nuestras fuerzas armadas lanzaron una gran cantidad de misiles balísticos y de alas y una gran cantidad de aviones no tripulados contra diversos objetivos del enemigo israelí en los territorios ocupados”.
Además, recalcó que con esos lanzamientos responden a “la guerra de genocidio y la destrucción integral (en Gaza) a los ojos del mundo y con un ilimitado apoyo estadounidense y occidental a la entidad criminal”.
Israel lleva a cabo desde hace tres semanas intensos bombardeos sobre Gaza tras el ataque de Hamás en su territorio el 7 de octubre, que dejó unos 1.400 fallecidos y casi 300 secuestrados, según las autoridades israelíes.
Los ataques de Israel como represalia han provocado más de 8.500 muertos en Gaza, según las autoridades de Hamás.