En una clínica de Valledupar, se confirmó el fallecimiento de el maestro Luis Egurrola, compositor y poeta sanjuanero, cuyas letras marcaron una época dorada en el género. Reconocido por su estilo único y su habilidad para narrar historias de amor y desamor, Egurrola dejó una huella imborrable en el vallenato con un legado musical que trascenderá generaciones.
Luis Egurrola alcanzó su primer gran éxito en 1993 con «Ven conmigo», interpretado por el legendario Diomedes Díaz. Para Egurrola, contar con la voz de Diomedes en una de sus composiciones fue «un premio para todo compositor». Esta colaboración fue el inicio de una carrera llena de canciones inolvidables que lo consolidaron como uno de los grandes de la música vallenata.
Entre sus composiciones más recordadas se encuentran temas como «Al final del sendero», «Las verdades de mi vida», «Sin saber qué me espera» y «Se está pasando el tiempo», todos interpretados por Diomedes Díaz. También escribió éxitos como «Lo que quieras de mí» (Jean Carlos Centeno), «Soñador» (Otto Serge), y «Por tu primer beso» (Jorge Celedón), entre muchos otros.
Sus canciones fueron interpretadas por las voces más emblemáticas del vallenato, como Jorge Oñate, Los Hermanos Zuleta, Silvestre Dangond, Los Diablitos, Adriana Lucía y Binomio de Oro, entre otros. Egurrola, con su sensibilidad poética, no solo escribió canciones, sino que creó verdaderos himnos del vallenato romántico.
Hoy, el vallenato despide a un maestro, un compositor que supo expresar el alma de un pueblo a través de sus letras. Luis Egurrola, el romántico eterno, se va, pero su música quedará para siempre.