Mujeres wayuú de distintas organizaciones, siguen reclamando justicia por los casos de feminicidios en La Guajira.
Esa fue la expresión ayer en el marco de la marcha liderada por jóvenes y estudiantes de la Universidad de La Guajira, que se realizó en la ciudad de Riohacha, en contra del gobierno del presidente Iván Duque.
Todas vestidas de rojo, se confundieron con los marchantes, exigiendo a las autoridades que no dejen en la impunidad los asesinatos de las mujeres, y que se esclarezcan los móviles de las muertes violentas de Luz Daris Cotes Ballestas, de la menor Yeini Elena Epieyu y de Blanca Irene Pirela.
Irama Movil, quien hace parte del colectivo Mujer Wayuú, aseguró que seguirán resistiendo a pesar del luto que llevan por las mujeres que han sido vilmente asesinadas.
“Hoy estoy de rojo que representa nuestra resistencia pero mi corazón y mi alma está de luto por todas aquellas que partieron”, expresó.
Dijo, que exigen justicia al Gobierno Nacional por aquellas mujeres asesinadas quienes fueron violadas y ultrajadas de una manera atroz.
En ese mismo sentido, el Colectivo Mujer Wayuú, sigue visibilizando los casos ante las autoridades competentes, pero llamando la atención para que se trabaje al interior de las familias con el objetivo de prevenir los actos de violencia en su contra.
Carmen Boscán, reconocida líder wayuú expresó que es un hecho preocupante que aún las autoridades no reconozcan los asesinatos como feminicidio a pesar de las evidencias.
Expresó, que es necesario denunciar los casos ante organismos internacionales como el ‘Comité para la eliminación de la discriminación contra la mujer’ y el ‘Comité de la tortura’, para que se llame la atención al Estado colombiano.
“Es muy preocupante lo que está sucediendo y se hace necesario un llamado a la movilización, a la denuncia y a las acciones internacionales”, dijo.
Puntualizó, también la líder wayuú que es una situación muy compleja, porque realmente un patrón que ha funcionado a pesar de que la Fiscalía dice que está investigando, y que hay información alrededor de lo que pasa con la violencia en contra de las mujeres en el territorio, es la impunidad, que es evidente y es una realidad que se debe ventilar.
Precisó, que en los casos de feminicidios siempre se culpa a la víctima, y las investigaciones se entorpecen en ese sentido, porque siempre van en el sentido de cuestionar a la mujer.
“Lamentablemente las investigaciones no se apuntan a los sospechosos de los casos que son evidentemente hombres, es muy delicado también lo que a veces sale en los medios, porque realmente la investigación siempre se gira alrededor de culpabilizar y victimizar más a la persona que ha sido agredida, que ha sido asesinada”, dijo.
Agregó, que es necesario que las denuncias sigan su curso, que den el resultado que tiene que ver con la captura de los responsables de los hechos narrados.
“Nosotras calificamos estos hechos como feminicidios, el hecho de haber sido asfixiadas, algunas fueron encontradas semidesnudas después de haber sido asesinadas, esto dice mucho y es preocupante que las autoridades no reconozcan que esto es un feminicidio y eso por supuesto reproduce la impunidad”, puntualizó.
Los casos
Los últimos tres casos de mujeres asesinadas en el departamento de La Guajira, corresponden a la trabajadora social Luz Daris Cotes Ballesta, quien habría muerto por asfixia mecánica, y cuyo cuerpo fue encontrado al interior de un motel en la ciudad de Riohacha. El otro caso corresponde a la menor de 16 años Yeini Elena Epieyu Gouriyu, cuyo cuerpo fue encontrado semidesnudo en un sector enmontado sobre la vía que del municipio de Fonseca conduce al corregimiento de El Hatico, al parecer también murió por asfixia mecánica.
El tercer caso corresponde, a una mujer extranjera identificada como Blanca Irene Pirela Osorio, y quien fue asesinada de varios impactos de arma de fuego en zona rural del municipio de Albania.
A estos tres casos, se suma el de Aura Esther García Peñalver reconocida líder social y autoridad tradicional de la comunidad de Arronshy, jurisdicción del municipio de Uribia, asesinada el pasado 28 de marzo.
En un comunicado dado a conocer en su momento, por la propia comunidad de Arronshy del corregimiento de Cardón, indicaron que Aura Esther, fue asesinada cuando llegaba a su comunidad en compañía de su esposo, cuando fue emboscada por dos sujetos desconocidos que se desplazaban en una motocicleta y le dispararon en varias oportunidades.
La líder social murió en el sitio del hecho, en tanto su esposo salió ileso del atentado.
En su momento, la Organización Nacional Indígena, en sus redes sociales lamentó el asesinato de Aura Esther, e indicaron que la lideresa había recibido amenazas a través de llamadas telefónicas y mensajes de texto, razón por la cual solicitó ante las autoridades competentes, medidas de protección para resguardar su seguridad y de las mujeres wayuú de su comunidad.
En tanto, la Organización Nación Wayuú, agregó que Aura Esther hacía parte de la resistencia que ellos lideran en contra del mal manejo de los recursos de la niñez wayuú por parte del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.
Las organizaciones indígenas de La Guajira, están exigiendo la captura de las personas responsables de estos feminicidios, recordando de otros que también siguen en la impunidad.