En un hecho lamentable luego que una madre de la etnia wayúu, cumpliera su proceso de parto dentro de un taxi, sin saberlo que sería gemelar, una de ellas falleció debido a que estaba ovitado y el otro en unas condiciones críticas, pero se encuentra en la unidad neonatal, así lo informó la parte médica del centro asistencial donde fueron recibidas para la asistencia oportuna.
Este hecho suscitó la tarde del lunes 19 de agosto cuando un conductor del taxi de placas UZB 111, Jhon Freddy De La Hoz, fue quien tomó la carrera de la mujer en la calle 35 con carrera 7, a pocos metros del mercado público de la ciudad de Riohacha, para llevarla hasta un centro asistencial pero el proceso de parto ocurrió mientras hacía el recorrido, logrando él junto a otra fémina que acompañaba lograron atenderla antes de ingresar a la clínica Cedes.
La médico general de la Clínica, Alicia Marcela Palomo Jinete, informó que lamentablemente una de las gemelas había fallecido, mientras que la progenitora y la otra criatura se encuentran recibiendo atención médica, “la paciente esta estable, aunque llegó en condiciones de riesgo, ella no sabía que era un embarazo gemelar, sucedió el hecho lamentablemente, pero hasta el momento todo esta estable con la paciente y la bebé”.
Asimismo, Palomo Jinete, señaló que se espera que en las próximas 24 horas la paciente se pueda pasar a hospitalización general dependiendo a la evolución a la asistencia médica, por su parte la recién nacida se encuentra en condiciones estables, pero debe demorar un poco más de tiempo en la unidad ya que todo depende a como reacciona debido a que se encuentra con pronóstico reservado.
Por su parte, el conductor del taxi, Jhon Freddy De La Hoz, manifestó que trato de hacer todo lo posible para que las niñas llegaran bien al centro médico pero muy a su pesar una de ellas falleció, “con nervios y todo puede sostener a una de las bebés para llegar a la clínica rápido, muchos nervios, pero logramos llegar entre 10 a 15 minutos, fue una experiencia que nuca se me olvidará”, explicó.
Sus compañeros de labores y la ciudadanía en general aplaudieron y felicitaron al taxista aunque lamentablemente una de las pequeñas había fallecido, lo importante que logro su cometido en llegar en el menor tiempo posible al centro asistencial para que la madre y las niñas fueran atendidas oportunamente.