Un día como hoy se conmemoran los 30 años desde que la Gran Central de Abastos del Caribe abrió por primera vez sus puertas, en aquel 18 de septiembre de 1989.
A partir de esta fecha se logra recordar cuando ingresaron al departamento del Atlántico, Barranquilla y área metropolitana los vehículos cargados con productos de primera necesidad para abastecer a toda la población, y desde ahí se ha venido trabajando día a día en el mejoramiento y la optimización de todos los servicios necesarios.
Asimismo se viene efectuando importantes inversiones para cambiar las luminarias de las áreas comunes por luces LED, consiguiendo así ahorro en el consumo energético.
Cabe destacar que en el presente año se inició un plan piloto de generación fotovoltaica con una planta solar que surte de energía al edificio administrativo, con los sabidos beneficios económicos y medio ambientales, lo cual han logrado desarrollar un plan de expansión que ha incrementado su área rentable en más del 40%, facilitando así la llegada de nuevos usuarios, teniendo en cuenta que la Central cuenta con 36 hectáreas de reserva para no solo el crecimiento de la actividad mayorista sino para emprender proyectos compatibles, como podría ser un Parque Agroindustrial o una Zona Franca, dada su proximidad al aeropuerto internacional.
Por otro lado, según el informe entregado por parte de la compañía en lo que va corrido del año, los ingresos de la compañía alcanzaron los $5.413 millones, 1% más que en el mismo período de 2018 cuando estuvieron en $5.404, por lo que se entiendo que el porcentaje promedio de la ocupación de la Central se sitúa en 90%.
Y entre el mes de enero y agosto han ingresado a la Central cerca de 182.211 toneladas de productos, 9% más que en 2018 cuando entraron 166.766 toneladas.
