La Fiscalía General de la Nación acusó al empresario y dirigente deportivo, Eduardo Dávila, de ser el presunto determinador del crimen del juez especializado de Santa Marta, Javier Cotes Laurens, por hechos registrados en diciembre del año 2001.
De acuerdo al ente acusador, hay indicios de que Dávila le pidió a un grupo paramilitar asesinar al juez, luego de que este lo condenara a 10 años de prisión y la extinción de dominio a una de sus propiedades en la década de los 90.
“Una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos verificó el material de prueba y estableció que el empresario sería la persona que ordenó asesinar al juez penal especializado”, señaló la Fiscalía.
Asimismo, recalcaron que las indagaciones arrojaron que a cambio de favores y supuestos servicios de seguridad, Dávila habría financiado una red de sicarios conocida como ‘Los Chamizos’, que estaba al servicio del jefe paramilitar de la Sierra Nevada de Santa Marta, Hernán Giraldo Serna y un clan familiar conocido como ‘Los Rojas’.
Al parecer, el empresario habría solicitado a esta organización asesinar al juez Cotes Laurens por aplicar el proceso de extinción a una propiedad en Bahía Concha, Magdalena, y condenarlo a 10 años de prisión por tráfico de estupefacientes.
“El día de los hechos unos sicarios de ‘Los Chamizos’ llegaron hasta la casa del juez Cotes en el barrio Santa Elena de Santa Marta y lo asesinaron”, precisó la Fiscalía.
Igualmente, el ente acusador mantuvo la medida de aseguramiento privativa de la libertad contra Eduardo Dávila y lo acusó por el delito de homicidio agravado. Este proceso se sigue en el marco de la Ley 600 de 2000 (anterior Sistema Penal).
Cabe anotar que Dávila se encuentra recluido en la cárcel El Bosque de la ciudad de Barranquilla cumpliendo una condena de 34 años por el homicidio de su esposa Carmen Vergara Díaz, ocurrido en la vía de Santa Marta a El Rodadero, en enero del año 2007.