En un evento denominado la ‘Fiesta Blanca por la Paz’, el sábado 21 de diciembre de 2019 se vivió en el municipio de Fonseca una parranda por la paz, reconciliación y fraternidad comunitaria. Fonseca, uno de los municipios más afectados por la violencia protagonizada por las desaparecidas guerrillas de la Farc, paramilitares y violencia común, vio como en su territorio se realizó una fiesta por la vida, la unidad, la reivindicación de derechos y el renacimiento de la cultura en la Tierra de Cantores.
Fonseca hace parte de los municipios categorizados dentro del Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial –Pdet–. Está ubicado en este territorio, un campamento de la reconciliación y paz donde habitan una gran cantidad de desmovilizados de las antiguas guerrillas, población que se encuentra en un proceso de reincorporación comunitario, que busca integrarse con toda la población que los rodea.
La Parranda Blanca sirvió como escenario para celebrar un año más de la firma de proceso de paz con la guerrilla de las Farc y rememorar un evento tradicional del municipio, que perdió vigencia por los cambios sociales de la comunidad. Fue un evento auspiciado, entre otras entidades, por El Reino de los Países Bajos, Fundación Alianza por la Paz –Apaz–, la Agencia para la Reincorporación y la Normalización, el Proyecto Prever, el Etcr Amaury Rodríguez y diferentes personalidades de la sociedad civil, funcionarios de la Alcaldía y del Departamento; exalcaldes, exrepresentantes de la Asamblea departamental, periodistas y la comunidad en general, que dijeron con su presencia: ¡sí a la paz y la reconciliación del territorio! ¡Sí a la transformación de la vida en las comunidades afectadas por la violencia!
Asistieron a este evento autoridades de las antiguas guerrillas, entre ellos Milton Toncel, a quien se le vio muy comprometido con el proceso de paz vigente, como también, integrado con la comunidad que llegó hasta este escenario. Disfrutó con gran parte de los fonsequeros que entre diferentes tonadas musicales, risas, fotos e historias propias de la cultura provinciana, disfrutaron del acontecimiento.
El único requisito para poder participar, además de estar dispuesto a encontrase con amigos y amantes de folclor, se exigió una sonrisa y ganas de parrandear. El boleto obligado a la entrada fue un regalo, un juguete, con el que se buscaba hacerle la Navidad feliz a un niño de las zonas rurales de Fonseca. Como símbolo de paz y reconciliación, se recomendó portar una camisa blanca.
Este evento estuvo lleno de abrazos, risas y canto, fue amenizado por la mejor música de la región representada entre otros por, la exparticipante de la Voz Kids, Sara Acosta; Franklin Moya, Jaider Brito y otra gran cantidad de compositores y artistas de la región. Como buena parranda, no podía faltar la comida y la bebida, el popular Old Parr se vio muchas mesas para amenizar el evento.
Esperemos que este tipo de evento se sigan realizando en el municipio, que se vuelva una norma en las regiones azotadas por la violencia y que se vuelva una costumbre en nuestro territorio la paz y la reconciliación, que el progreso sea el patrón en nuestro departamento.