Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, calificó 2024 como un «año perdido» para el sector comercial en Colombia, señalando que ni las próximas actividades de Black Friday ni la temporada navideña lograrán revertir el débil desempeño del comercio.
Durante la conferencia Trabajemos unidos en equipo por nuestra Colombia, organizada por la Unión de Empresarios por el Atlántico (Uepa), Cabal expuso las dificultades que atraviesa el sector y las limitadas perspectivas de recuperación en los dos meses restantes del año.
“La mayoría de los sectores del comercio llevan el año perdido, hay que aclarar que no es el mismo comportamiento que puede sufrir un sector de comercio de confecciones y accesorios de moda, que lo que es un sector como el de vehículos o el sector de tecnología. De las 19 categorías que tiene el Dane, 14 llevan el año perdido. Quedan dos meses, que tradicionalmente son meses mejores que los anteriores, y esperamos que estos dos meses ayuden a que el golpe no sea tan grande, pero ya para muchos sectores el año está perdido”, expresó Cabal.
Cabal también expresó su frustración ante lo que considera una falta de interés del Gobierno hacia el comercio. “Lamentablemente el Gobierno no escucha el comercio porque, sentimos que para el Gobierno no es importante el comercio. De hecho, el propio presidente Petro lo dijo desde el día uno que el comercio no agrega valor agregado a la economía, entonces, cuando no hay esa mentalidad de que el comercio es un sector importante en la economía, que además genera el 32,1 % del empleo en Colombia, pues obviamente es muy difícil que seamos escuchados”, apuntó.
El líder gremial manifestó preocupación por los recientes indicadores de desempleo, que apenas mostraron una leve reducción del 9,3 % al 9,1 % en septiembre, lo que calificó como un «estancamiento» en lugar de un avance real. En este contexto, criticó la reforma laboral que se debate en la Comisión Séptima del Senado, señalando que sus disposiciones encarecen el empleo formal y estimulan la informalidad.
“No cambió mucho el mercado laboral, sigue habiendo un número de desocupados muy importante, más de 2,3 millones, y la gran preocupación que tenemos con la reforma laboral es que esta es una reforma que destruye el empleo, no ayuda a generar empleo, es una reforma que no promueve la formalización, sino que estimula la informalidad. Los artículos que están vivos y que pasan a la Comisión Séptima del Senado, son artículos que están aumentando los costos laborales de una manera considerable. La reducción de la jornada laboral de 9 a 7 de la noche, esas dos horas significan (porque se convierte en recargo nocturno y horas extras) un incremento del 8,95 % de los costos laborales”, concluyó.