“Si las instituciones que hoy tenemos en Colombia no son capaces de estar a la altura de las reformas sociales que el pueblo, a través de su voto, decretó, demandó, mandó y ordenó, entonces no es el pueblo el que se va arrodillado hacia su casa, derrotado.
“Son las transformaciones de esas instituciones las que se tienen que presentar. No es el pueblo el que se va. Es la institución la que cambia. Esa es la historia de la democracia y de los pueblos libres.
“Por tanto, si esta posibilidad de un gobierno electo popularmente, en medio de este Estado y bajo la Constitución de Colombia, no puede aplicar la Constitución porque lo rodean para no aplicarla y le impiden, entonces Colombia tiene que ir a una Asamblea Nacional Constituyente”.
Este fue el planteamiento del presidente de la República, Gustavo Petro, al intervenir ante la multitudinaria movilización de la ‘Minga por las transformaciones para la vida, el territorio, la democracia y la paz’, realizada este viernes en Cali.
El Jefe de Estado expresó de manera enfática que, ante la incapacidad de las instituciones para hacer las reformas sociales, “Colombia no se tiene que arrodillar. El triunfo popular del 2022 se respeta y la Asamblea Nacional Constituyente debe transformar las instituciones para que le obedezcan al pueblo su mandato de paz y de justicia, que es fácil de lograr en Colombia”.
“Es el pueblo el que tiene la palabra y este presidente llegará hasta donde ustedes digan”, manifestó el mandatario.
Dijo que “la transformación real del país no le gusta a mucha gente a la que sí le gusta la sangre” y sostuvo que “este presidente se restea hasta donde sea para lograrlo”.
“Ese es mi propósito, es mi voluntad. Mientras esté vivo lucharé, trabajaré todos los días porque los sueños del pueblo colombiano, la paz de Colombia, la posibilidad de la historia, el país de la belleza y la potencia mundial de la vida puedan gritarle a toda la humanidad que lo hicimos en Colombia, que demostramos en la historia que es posible cambiarla ahora y que es posible que tengamos, entonces, una sociedad que no se mate entre sí, que no aplauda al genocidio de los niños, que no aplauda la muerte de la naturaleza y que pueda ser vibrante, una democracia multicolor, una potencia mundial de la vida, una Colombia humana”.
Colombia tiene la tasa de mortalidad infantil más alta de los países de la OCDE y murieron 340 mil personas en la última década en el país, personas que hubieran sobrevivido si se les hubiera atendido en los hospitales y clínicas, señaló el mandatario.
“El sistema de salud mercantil que tenemos mató a 340 mil colombianos en los últimos diez años mientras se robaban 15 millones de millones de pesos llevados a sus arcas particulares, y entonces ahora nos dicen que no podemos ni debemos reformar la salud”, afirmó.
De acuerdo con el presidente Petro, el triunfo electoral de su programa de gobierno implica hacer las reformas y cambiar a Colombia.
“Colombia cambia si cambia su sistema de salud, si cambia su sistema laboral, si cambia su sistema agrario, si cambia su sistema pensional, si cambian las relaciones entre las personas, no simplemente frente a la producción, sino frente al amor, frente al barrio, frente al hijo, frente a la familia, frente a la universidad”, concluyó.