Definitivamente, como toda actividad en la vida, el desarrollo social, económico, cultural y comunitario de los pueblos y los territorios se genera, se logra, y satisface necesidades eficientemente solo si se planifica bien y correctamente.
Y dentro de esa planificación cabe la creatividad e innovación para cambiar, avanzar, mejorar y dar soluciones favoreciendo la relación costos-beneficios y transformando los más básicos indicadores de insatisfacción de necesidades sociales en objetos de satisfacción, porque si las deficiencias han atrasado nuestro desarrollo, hasta ahora, al solucionar esas carencias este puede potenciarse e impulsarse.
Toda ésta introducción filosófica primero, para expresar mi satisfacción como guajiro por encontrarme con unas propuestas de avanzada sobre temas de los cuales llevamos muchos años hablando y proponiendo, y claro, con logros incipientes y muy primarios, y segundo, para hacerle un reconocimiento a Teresa “Pinina” Iguarán Fernández, afortunadamente hoy candidata a la Cámara de Representantes por nuestro Departamento.
No debe avergonzarnos a quienes hace tiempo por amor al folclor, por estar hace muchos años a través de la política de partidos buscando y proponiendo soluciones de desarrollo de todo tipo, y a quiénes hemos dedicado parte de nuestra existencia dentro de la música tradicional vallenata en La Guajira a mantenerla incólume, y también a escudriñar el aporte socio-económico para nuestros pueblos y sus moradores, y de manera especial a nuestros artistas, cultores y gestores… y que ese aporte traiga soluciones.
Nos hemos entretenido y detenido los guajiros y en especial los habitantes del sur, en lograr consolidar la Ruta Folclórica que involucra desde el corregimiento de El Plan, La Jagua, Urumita, Villanueva, El Molino y San Juan del Cesar y el empalme de La Junta con Patillal. Y eso está bien.
El punto es que eso nos ha costado tiempo, “neuronas” y muchos foros y discursos, y de ese círculo no hemos salido; eso nos ha parecido solución trascendental y hasta ahí hemos llegado, hoy hemos invertido para que el turista se entere, se solace, conozca y se ilustre sobre los valiosos y connotados orígenes de nuestra música, de su evolución, de los personajes y lugares donde han nacido las canciones y donde se han dado gestas que enorgullecen al folclor y en especial a la música vallenata.
Debo reconocer que le escuché a esta mujer uribiera, con raíces étnicas wayuú una gran propuesta que va más allá de esa Ruta Folclórica y es la creación del Distrito Folclórico y Turístico de la Música Tradicional Vallenata que comprenda los territorios desde Riohacha hasta La Jagua del Pilar.
Esto tiene un alcance y unas dimensiones políticas, folclóricas-culturales, sociales y económicas que podríamos estar hablando de “otra bonanza” que nos manda Dios.
Respetuosamente acoto, no faltarán “padres”, autores y mecenas que digan que esa propuesta es de su autoría o que ya la habían hecho hace mucho tiempo. ¡Esperen y verán!
Miren, el mejoramiento de la vía San Juan – La Junta se hizo para consolidar la Ruta Folclórica, atraídos por la “ventana marroncita”. Eso es una muestra más que solo hemos pensado hasta ahí.
Hoy la propuesta de ‘Pinina’ Iguarán le da un vuelco a esa importante pero corta propuesta de exaltación, persistencia y generación de beneficios económicos que solo han favorecido a unos cuantos, cómo es la Ruta Folclórica, marginándose elementos esenciales para el desarrollo regional, los beneficios colectivos y el reconocimiento histórico, folclórico y cultural de pueblos y territorios como Riohacha, Machoballo, Fonseca y demás territorios circunvecinos que tienen historia, incidencia y suma importancia para nuestra música tradicional y para el desarrollo económico y cultural de La Guajira.
‘Pinina’, estás proponiendo un hecho que puede ser la reivindicación de algo que hemos reclamado tibiamente los guajiros hace muchos años como son los orígenes, la paternidad y cuna territorial de nuestra Música Tradicional Vallenata y además, no hemos sabido gestionar estos atributos. Éstos han sido aprovechados por otras regiones, han sido exitosamente explotados y han servido de vehículo social y político para apalancar desarrollo económico, social, de poder político y crear identidad cultural, y nosotros, los padres o creadores, otra vez, “sin el pan y sin el queso”.
‘Pinina’, como te lo manifestamos en Villanueva, es nuestro deber como guajiros apoyarte en el desarrollo de esta propuesta. Es deber inaplazable luchar por la creación de ese Distrito y que comiencen ya los expertos, en vez de entrar a reclamar paternidad, a hacer pedagogía de la trascendencia económica, social, folclórica, cultural y de integración que tiene la propuesta. Por otro lado, miremosla como el reconocimiento, que no se ha hecho aún, para nuestros juglares, nuestras regiones con sus diferentes pero incuestionables aportes a la Música Tradicional Vallenata, “y que se acabe la vaina”, como dijo el Viejo Mile, y comencemos a recibir los beneficios que no nos han dado ni nos han llegado vía “está mina de recursos” como es nuestra Música Tradicional Vallenata.