Desde contar cartas a estrellar un carrito de golf solamente para vengarse de un casino. En este artículo, especial para aficionados a los casinos en línea Colombia, conoceremos algunas de las anécdotas de celebrities más insólitas ocurridas en Las Vegas. Algunos te harán pensar que “The Hangover” es casi un documental de lo que sucede en “La ciudad del pecado”.
Ben Affleck, el contador de cartas
El actor y actual esposo de Jennifer López es conocido por su habilidad de con las cartas, particularmente en el Blackjack. Incluso los portales de noticias del corazón aseguran que esta afición le ha traído problemas maritales más de una vez y en más de un matrimonio, además.
En una entrevista, Affleck contó que pasó una parte significativa de su tiempo libre durante varios años estudiando sistemas de probabilidad complejos para aprender a contar cartas y mejorar sus posibilidades de ganar.
Admitió que en una ocasión lo invitaron a retirarse de un casino de Las Vegas debido a que lo consideraban «demasiado competente». Explicó que le fascinaba la dinámica del juego, por lo que se sumergió en su estudio y aprendió rápidamente, quizás demasiado bien para los intereses de los casinos.
También mencionó que tuvo problemas relacionados con esto en un casino en Canadá mientras filmaba «Batman vs Superman» y estuvo cerca de ser expulsado, lo cual habría encontrado divertido. Claramente, tiene una rapidez mental poco vista.
George Clooney quiso participar en la construcción de un casino
Podríamos decir que el papel de Danny Ocean en “Ocean’s Eleven” le quedaba pintado. Tanto es así que George Clooney confirmó haber tenido una participación millonaria en la construcción de un casino en Las Vegas con el nombre de «Las Ramblas», inspirado en el famoso paseo de Barcelona.
El gran casino iba a contar con 4.400 habitaciones de hotel y apartamentos en un edificio de 11 plantas que albergará tiendas. Aunque el área de juego iba a ser más pequeña en comparación con otros hoteles de Las Vegas, el objetivo era atraer a un público más selecto.
Finalmente, el proyecto fue cancelado y no trascendió qué pasó con el dinero de Clooney. De todas formas, creemos que se recuperó de la pérdida, porque todo esto ocurrió hace más de una década.
Frank Sinatra, mal perdedor
Frank Sinatra fue uno de los primeros artistas en poner a Las Vegas en el mapa del entretenimiento. Con frecuencia se hospedaba en el ahora demolido hotel Sands, donde también realizó algunas de sus actuaciones más famosas en Las Vegas. Sinatra se presentó en la Copa Room del Sands al menos tres veces al año, a menudo con residencias que duraban dos semanas.
En ese sentido, Sinatra fue un pionero en la industria de los shows en vivo en Las Vegas, una tendencia a la que se han sumado grandes estrellas a lo largo de los años como Lady Gaga, Adele, Celine Dion y recientemente U2.
Sinatra amaba ir al casino, pero no siempre tenía suerte. Según relatan periódicos de la época, un día el cantante se enfureció cuando le cortaron el crédito para apostar en el hotel Sands. Por ese motivo, condujo un carrito de golf por el lugar, volcando muebles y rompiendo una ventana de cristal. En el mismo incidente tuvo una pelea en la que perdió dos dientes y destrozó la suite donde se había hospedado a lo largo de 15 años.
“El aviador” compró un casino porque le molestaban sus luces
Ok, Howard Hughes no es una estrella de cine. En todo caso, Leonardo DiCaprio, el actor que lo encarnó en la película «El Aviador», sí lo es. Sin embargo, esta anécdota es tan extraña que no podía quedar fuera del listado propuesto en este artículo.
Hughes es conocido por su fortuna, pero también por sus excentricidades. En 1966, a los 61 años, Howard Hughes llegó a Las Vegas y se instaló en el Desert Inn Hotel and Casino. Después de un conflicto con la dirección del hotel que lo llevó a ser expulsado de su habitación, Hughes tomó la sorprendente decisión de comprar el hotel entero. Utilizó el octavo piso como su oficina central y el noveno piso como su ático privado.
Posteriormente, Hughes adquirió varios casinos en Las Vegas, incluyendo el Sands Casino, aunque también compró un pequeño casino llamado ‘The Silver Slipper’. La razón detrás de esta compra peculiar se debió a que su habitación en el ático del Desert Inn estaba justo en frente de un llamativo letrero de neón en forma de zapatilla del casino Silver Slipper.
Este excéntrico hombre consideró que esta luz de neón era de mal gusto y perturbaba su sueño. Inicialmente, intentó que la gerencia del casino retirara el letrero, pero al negarse, optó por comprar el casino en su totalidad con el único propósito de eliminar la luz molesta y poder dormir plácidamente.