El sistema de salud colombiano está compuesto por un amplio sector de seguridad social complementado por una red privada de prestadores con clínicas de mucho prestigio en la región y en el mundo de la salud.
Desde Aracataca, el presidente Gustavo Petro dijo que Colombia tenía el peor sistema de salud del mundo. En el gremio no cayó nada bien este calificativo. El país es reconocido por contar con grandes profesionales, a instituciones de salud premiadas en muchos niveles. La conclusión del presidente y su jefa de cartera del sector desconoce estos reconocimientos.
A inicios de la década de los 90, solamente el 30 por ciento de los colombianos contaba con asesorías médicas. Con el paso de los años, Colombia se ha posicionado como uno de los países con el mejor sistema de salud en Latinoamérica, lo documenta la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi).
Dicho por el exministro de Salud, hoy ministro de Educación, Alejandro Gaviria, que Colombia ha tenido un gran avance con los siguientes resultados: Actualmente, el 98% de colombianos está cubierto por el sistema de salud, que, en siete años, Colombia se había convertido en un referente para la región y para el mundo; en temas de política farmacéutica, se ha regulado el precio de más de mil medicamentos, se alcanzó la cobertura total para los pacientes que padecen de enfermedades crónicas. Colombia fue declarado el primer país del continente libre de sarampión, rubéola y rubéola congénita, han disminuido considerablemente las cifras de embarazo en adolescentes, se tiene el sistema de vacunación más completo de América Latina, ofreciendo gratuitamente 21 vacunas para 26 enfermedades, la mortalidad infantil cayó un 22 por ciento. ¿Somos los peores?
Según el mandatario Petro, Colombia fue “uno de los 20 peores países del mundo en resistir la enfermedad del Covid. ¿Por qué nos dicen otros, entonces, que nos fue muy bien? ¿Por qué no se reconocen los logros? Bloomberg publicó una lista denominada ‘Resiliencia Covid’ con los mejores y peores manejos de la pandemia, y Colombia fue la mejor de América Latina en la contención y manejo del virus, puesto 12 en el mundo.
Hoy el ministro de Educación guarda silencio, pero como en muchas casas mandan las mujeres, Quien sí salió a cuestionar al presidente fue su esposa, una economista reconocida. Desempolvó una publicación del hoy álfil del presidente de la República, del año 2020 sobre el sistema de salud colombiano, en esa publicación el exministro de Salud, Gaviria, hace un recuento de lo que significó la Ley 100 para el sistema de salud y del papel que han tenido las EPS en el mismo. Ambas quieren ser acabadas por el Gobierno de Petro y su ministra.
La OMS certifica el sistema de salud de Colombia con una buena calificación, nuestro país ocupa el puesto 22 entre 190 países, superando a países como Alemania, Suecia, Canadá, Estados Unidos, Cuba y China. Por otra parte, el portal CEO World también clasifica a Colombia en el lugar 36 entre 85 países, por encima de Italia, Chile y Brasil.
Si es cierto que muchos colombianos estaban cansados de los desaciertos y en algunos momentos del abandono de gobiernos anteriores, golpeando inmisericordemente más a las clases menos favorecidas y votaron por un cambio de esperanza, no por la continuidad de la polarización ni por la incertidumbre, cuando se habla de salud, de cambios, pero en no muy buenos términos, crea pánico, crea inseguridad y desconfianza de un sistema de salud vital para la sociedad.
No es necesario mostrar bellezas a los ciegos ni decir verdades a los sordos, basta con no mentir a quien escucha, ni decepcionar al que confió en un cambio, las palabras desacertadas puedan que conquisten, pero eso será temporalmente, si no cambiamos el discurso y dejamos de ver el espejo retrovisor no se avanza en lo prometido; el tiempo apremia, hay que mostrar el verdadero cambio por quien las mayorías votaron, con eso se gana o se pierde para siempre, Colombia somos todos.